Nos guste o no nos guste Irán -es cuestión secundaria- este país únicamente ha ejercido su derecho a la legítima defensa.
Por Lucio Martínez Pereda | 15/04/2024
Las paradojas de la Historia: son los errores de un incompetente líder demócrata como Biden los que ponen la actual crisis prebélica mundial al servicio de los intereses internacionales de la ultraderecha. Ni el Asno Salvaje Trump lo hubiera hecho mejor.
El atentado contra Irán fue una obra conjunta Netanyahu-Biden: para el líder ultraderechista la reacción defensiva de Irán le sirve para ponerse un disfraz de víctima con la que ocultar su condición de genocida. Biden espera y necesita para ganar sus elecciones un ataque de Irán. Nos guste o no nos guste Irán -es cuestión secundaria- este país únicamente ha ejercido su derecho a la legítima defensa.
Europa es un socio secundario y vicario en la creación de este nuevo escenario de Guerra Fría. Estamos ante un gozne histórico “creado”, y Sánchez y el PSOE tendrán que elegir entre el partido de la Guerra y el partido de la Paz. Si elige lo primero tendrá que aumentar el presupuesto de armas a costa de sacrificar el dinero destinado a educación y sanidad públicas -estará llevando a cabo la política del PP- Vox. ¿Y cual será el resultado de ello?: su derrota segura en las siguientes elecciones generales. Los vientos de guerra -si la izquierda no sabe cabalgarlos- siempre han beneficiado históricamente a la derecha
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