Kaja Kallas pierde las elecciones europeas en Estonia, que gana la abstención y sus socios de gobierno

La oposición ya ha pedido la dimisión de Kaja Kallas por los malos resultados de su partido, y además está contra las cuerdas tras la sorpresiva dimisión de un alto funcionario del Ministerio de Defensa.

Por Angelo Nero | 17/06/2024

Los países bálticos son de los más abstencionistas en las elecciones al Parlamento Europeo, en Lituania ronda el 70%, solo por debajo de Croacia, y en Letonia el 64%, mientras que en Estonia, que tiene el mayor indice de participación, esta solo llega al 37,7%.

En este último país, las elecciones europeas las ha ganado el partido conservador Isamaa (Patria) presidido por Helir-Valdor Seeder, afiliado al Partido Popular Europeo, que experimenta un meteórico ascenso desde la cuarta plaza a la primera, del 10,29 % al 21,5%, y pasa de uno a dos escaños en la Eurocámara. Isamaa forma parte del gobierno de coalición de la primera ministra Kaja Kallas, liderado por su partido, el Partido Reformista Estonio, y un tercer socio, el Partido Socialdemócrata, del actual ministro del interior, Lauri Läänemets, que retrocede del 23,39% de 2019 al 19,3%, aunque conserva sus dos diputados en Estrasburgo.

El que sufre un batacazo es, precisamente, el partido de la primera ministra, el Partido Reformista Estonio, que baja ocho puntos porcentuales, del 26,24% al 17,9%, pierde un escaño y se queda sólo con uno. Kaja Kallas es una de las dirigentes europeas más beligerantes con Rusia, que ha emitido una orden de busca y captura contra ella por promover el nazismo derribando monumentos de la era soviética, y ha aumentado los impuestos para dedicar aumentar el presupuesto militar, convencida de una inminente agresión rusa a su país. La oposición ya ha pedido su dimisión por los malos resultados de su partido, y además está contra las cuerdas tras la sorpresiva dimisión de un alto funcionario del Ministerio de Defensa en protesta por la supuesta inacción del gobierno para reforzar el presupuesto militar.

Intentando capitalizar parte del descontento con el gobierno estonio, ha subido la extrema derecha, xenófoba y euroescéptica, del Partido Popular Conservador de Estonia (EKRE), liderada por Martin Helme, que pasa del 12,72 % al 14,9%, y mantiene el diputado que tenía.

Por último, el socioliberal y populista Partido del Centro Estonio (KE), liderado por el ex primer ministro Jüri Ratas, se mantiene con un 12,4%, un porcentaje idéntico al conseguido en 2019, y un diputado.

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