«Si la mayor parte del mundo sigue teniendo un acceso mínimo a las vacunas, los tratamientos y las pruebas contra la COVID-19, esta pandemia continuará».
Javier F. Ferrero
Médicos Sin Fronteras ha denunciado la implacable oposición a la propuesta de Exención de los Aspectos de los Derechos de Propiedad Intelectual relacionados con el Comercio (ADPIC) en la Organización Mundial del Comercio (OMC) un año después de que India y Sudáfrica la presentaran. La negativa parte de un pequeño grupo de miembros de la OMC, entre los que se encuentran la Unión Europea (UE), Reino Unido, Noruega y Suiza.
«En el año que ha pasado desde que India y Sudáfrica presentaron por primera vez la histórica exención de los ADPIC en un esfuerzo por aumentar el acceso de la población a las herramientas médicas para la COVID-19, trágicamente más de 3,6 millones de personas han muerto a causa de esta enfermedad», denuncia la doctora Sharmila Shetty, asesora médica de vacunas de la campaña de Acceso de MSF.
Esta exención, que ahora cuenta con el apoyo de más de 100 naciones, eximiría de patentes y otros derechos de propiedad intelectual (PI) a las vacunas, tratamientos, pruebas y otras herramientas sanitarias que se necesitan urgentemente para la lucha contra la COVID-19. Sería solamente mientras dure la pandemia, y allanaría el camino para que muchos países aumenten la producción y el suministro para que estas herramientas médicas de distribuyan globalmente, de forma equitativa y salven vidas.
«El mundo ha perdido un año entero en el que se pudieron haber salvado innumerables vidas y se pudo haber aumentado de forma equitativa el acceso mundial sostenible a las herramientas médicas de la COVID-19. Un grupo de gobiernos ha optado por bloquear obstinadamente la exención de los ADPIC desde el principio, y estos son los mismos gobiernos que han almacenado vacunas y terapias para proteger a sus propias poblaciones en lugar de compartirlas», señala Shetty.
Expone la doctora que «si la mayor parte del mundo, incluyendo a los países en los que trabajamos, sigue teniendo un acceso mínimo a las vacunas, los tratamientos y las pruebas contra la COVID-19, esta pandemia continuará, podrán desarrollarse nuevas y más transmisibles variantes, los sistemas sanitarios colapsarán y más personas sufrirán y morirán».
«La UE, el Reino Unido, Noruega y Suiza deben dejar de obstruir la exención de los ADPIC y apoyar la adopción de un esfuerzo innovador que podría aumentar el acceso a las herramientas médicas de la COVID-19 para todos, en todas partes», sentencia.
Gobiernos y salud
Además de aceptar la propuesta de Exención de los Aspectos de los Derechos de Propiedad Intelectual relacionados con el Comercio, los gobiernos deben utilizar todas las herramientas legales y políticas para facilitar la producción ininterrumpida y la diversidad en el suministro de herramientas médicas de la COVID-19, incluyendo el pleno uso de las flexibilidades existentes de los ADPIC para proteger a la población. Asimismo, todos los gobiernos con suficientes dosis de vacunas COVID-19 deben redistribuir inmediatamente las dosis excedentes al mecanismo COVAX.
De igual forma, Estados Unidos y Alemania deben presionar a Pfizer-BioNTech y a Moderna para que compartan la tecnología y los conocimientos técnicos de las vacunas de ARNm con los fabricantes de los países de ingresos bajos y medios. Los conocimientos no deben estar vinculados a los beneficios empresariales a costa de la vida de millones de personas.
Por último, todos los gobiernos deben apoyar el Centro de Transferencia de Tecnología de Vacunas de ARNm de la OMS con apoyo financiero y político. Solo con el apoyo gubernamental común podemos salir de la crisis sanitaria sin dejar a nadie atrás.
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