El Departament d’Educació justifica el cierre de las plazas escolares públicas con la excusa que la sobreoferta de plazas produce segregación escolar, ya que las familias tienen más posibilidades de elegir centro educativo.
Por Cristina S.
Lidón Gasull, directora de la aFFaC (Associacions Federades de Famílies d’Alumnes de Catalunya) y abogada.
¿Qué es lo que está ocurriendo en Catalunya con los ratios en la educación pública?
Pese a que el gobierno catalán ha querido enmascarar el cierre de plazas escolares públicas aludiendo a una bajada de ratio, la realidad es que actualmente en Catalunya tenemos menos plazas públicas que el año pasado. En concreto, según los datos de planificación del Departament d’educació, para el curso 2022/2023 se han eliminado 5.322 plazas públicas si lo comparamos con la planificación del curso 2021/2022. Sin embargo, pese al problema de sobreoferta de plazas privadas concertadas que tenemos en Catalunya y que es causante, en gran parte, del problema de segregación escolar que sufrimos, el gobierno ha hecho una renovación de los conciertos educativos casi automática.
Por tanto, por mucho que el consejero González-Cambray se empeñe en decir lo contrario, no estamos ante una bajada de ratio sino ante un cierre de plazas públicas porque si solo limita el número de alumnos por aula, pero no aumenta el número de grupos-clase de los centros educativos, lo que está haciendo es limitarse a ofrecer menos plazas en la red pública y empujar al alumnado hacia la red privada concertada.
¿Cuál es el motivo implícito, a quién beneficia, para que esto se lleve a cabo el próximo curso?
En Catalunya las familias cada vez más apuestan por escolarizar a sus hijos e hijas en la educación pública. De hecho, en los últimos diez años la demanda en la escuela privada concertada ha caído, de media, más de un 4%. Si nos fijamos en la preinscripción del curso pasado, la demanda cayó casi un 5%, sobrando más de 4.500 plazas privadas concertadas. El gobierno catalán ha tenido que rescatar a muchas escuelas privadas sostenidas con fondos públicos porque no han aguantado la caída y han tenido que pasar a la red pública, otras han tenido que cerrar sus puertas.
Aunque esto no es nuevo. En los últimos años la consejería de educación ha apostado por una estrategia que claramente beneficia al sistema privado concertado frente al sistema educativo público: el cierre de plazas públicas para forzar la escolarización en el sistema privado concertado y poder mantener, así, los conciertos educativos a las escuelas privadas.
Es importante recordar que el 70% de los centros privados que reciben fondos públicos pertenecen a congregaciones religiosas católicas, por la que desviar alumnado de la educación pública a la educación privada concertada comporta, en muchos casos, vulnerar el derecho de las familias a que sus hijos e hijas sean educadas de acuerdo con sus principios y convicciones.
¿Qué consecuencias puede tener en el ámbito educativo y social?
Las consecuencias ya las estamos padeciendo. En el contexto de la Unión Europea, Catalunya es la tercera región con más educación privada concertada, la primera con mayor abandono escolar prematuro y la cuarta con mayor tasa de riesgo de pobreza, solo por detrás de Bulgaria, Rumania y Grecia. Es llamativo que, mientras el sistema educativo catalán no llega ni al 70% de plazas públicas, la mayoría de los países europeos se sitúan por encima del 90% de escuela pública. Es el caso de países como Alemania (91,62%), Italia (94,89%), Finlandia (96,92%), los Países Bajos (99,14%) o Irlanda (99,58%), entre muchos otros.
Dicen, sin embargo, que esta bajada de ratios mejorará el sistema educativo, ¿hasta qué punto esto es así?
El Departament d’Educació justifica el cierre de las plazas escolares públicas con la excusa que la sobreoferta de plazas produce segregación escolar, ya que las familias tienen más posibilidades de elegir centro educativo. El problema es que la sobreoferta de plazas no la tenemos en el sistema público sino en el privado concertado, por lo que la excusa de la consejería es realmente perversa. Además, el propio sistema está diseñado para obligar a las familias a elegir centro educativo, pero para que las familias no puedan elegir educación pública el gobierno cierra preventivamente las plazas públicas, forzando la elección hacia los centros privados concertados. Si nos paramos a pensar fríamente lo que vemos es a una administración jugando con las familias, haciéndoles creer que están eligiendo centro educativo cuando la realidad es muy distinta.
Por otra parte, aún está por ver que la ratio alumno-profesor realmente baje. Esto a día de hoy no lo podemos saber porque no tenemos los datos de la relación entre el número de alumnos y el número de profesionales que les atenderán. Además, tenemos que tener en cuenta que ha habido una bajada demográfica importante, pero a la vez se han eliminado grupos clase, así que ya veremos cuando tengamos datos. De todos modos, el número de alumnos por clase no es uno de los elementos que más influyen en la calidad de la educación. Existen otros elementos mucho más importantes como son la codocencia, la calidad y estabilidad el profesorado y, sobretodo, la escolarización equilibrada y la diversidad, y esto último se consigue corrigiendo el problema de la segregación escolar.
La realidad es que Catalunya está entre las comunidades autónomas con más segregación escolar del estado español. Por una parte, la existencia de una doble red educativa, una pública y otra privada concertada, que establece una categorización entre centros educativos en función de su titularidad y, por otra, la interpretación extensiva que la administración educativa hace del mal llamado derecho de elección de centro en un contexto de sobreoferta de plazas privadas concertadas, configuran el escenario idóneo para la segregación escolar y, en consecuencia, para el aumento de las desigualdades educativas y sociales entre nuestro alumnado.
Otra de las novedades que pretende introducir el Departament d’Educació es poner en marcha una «herramienta para luchar contra la segregación escolar y la concentración de alumnos en situación socioeconómica precaria» en algunas escuelas, ¿Cómo pretenden solventarlo?
Esta herramienta es lo que en Barcelona se ha llamado “Pla de Xoc contra la segregació” y que ahora se está implementando en otras partes de Catalunya. La herramienta consiste en repartir al alumnado vulnerabilizado, en gran medida, entre la red privada concertada, casi siempre religiosa, con la promesa de ofrecerles beneficios económicos durante todo el periodo de escolarización, pero si no aceptan la plaza que les asignan pierden los beneficios económicos. Existe una especie de chantaje por parte de la administración. Tal y como se está aplicando este plan, parece que la administración persigue desviar alumnado de la red pública hacia la privada concertada que nadie quiere. Esto acaba generando que el privilegio de elección de centro esté solo en manos de las familias con más recursos, mientras que aquellas que se encuentran en situación de vulnerabilidad, ni siquiera tienen el derecho de escoger entre opción pública o privada concertada.
Por otro lado, mediante la dispersión del alumnado vulnerabilizado, la administración mejora así los datos de segregación escolar repartiendo solo a una parte, aunque ello pueda implicar desarraigar a estos alumnos de su contexto social y de su red vecinal. Además, se trata de una medida asistencialista que, además, genera desigualdad entre unas familias que sí pueden escoger escuela pública para la escolarización de sus hijos e hijas y otras familias que se ven obligadas a aceptar plazas privadas concertadas que, en la mayoría de los casos, son religiosas y estaban condenadas a desaparecer porque nadie las querías.
¿Reducirá realmente dicha desigualdad educativa?
Para contestar a esta pregunta tendremos que esperar a la evaluación de la medida después de unos años de aplicación. De todos modos, desde un punto de vista del principio de igualdad y no discriminación, no funcionará. No es posible que solo se reparta al alumnado vulnerabilizado y no al conjunto del alumnado para poder conseguir una escolarización equilibrada y diversa. Para ello, hay que aumentar el número de plazas públicas, tenemos que conseguir la equivalencia entre los centros y limitar el derecho de elección de todas las familias y no solo de aquellas que se encuentran en situación de vulnerabilidad.
Como asociación, ¿Cuáles son vuestras propuestas para desarrollar un sistema educativo público, equitativo y de calidad?
En este contexto, la única forma de conseguir un sistema educativo público, equitativo y de calidad es:
- Eliminar progresivamente la doble red existente actualmente en Catalunya y aumentar el número de plazas públicas;
- Limitar la elección de centro de las familias en pro de una escolarización equilibrada y diversa;
- Asegurar la equivalencia entre centros educativos públicos;
- Garantizar que todos los centros educativos públicos sean inclusivos, superando cualquier obstáculo que pueda tener el alumnado con necesidades específicas de soporte educativo y/o sus familias;
- Simplificar el procedimiento de acceso a la educación pública;
- Aumentar y fortalecer la representación de las familias en los órganos de decisión del sistema de admisión;
- Dotar de un financiamiento adecuado los centros públicos para garantizar la gratuidad real del sistema educativo público.
¿Cuáles son las acciones que habéis comenzado a desempeñar al respecto?
Desde la aFFaC llevamos años analizando datos para hacer un seguimiento de la situación de la educación pública. Nuestro Observatorio analiza cada año la demanda de las familias, la oferta de plazas, los conciertos educativos otorgados, la financiación del sistema educativo público y privado, etc.
Cada año lanzamos la campaña “Matricula a la pública” donde promocionamos la educación pública porque el Departament d’Educació no lo hace y trabajamos para que las familias no entren en el perverso juego de la elección de centro y apuesten por la escuela pública de proximidad. Además les facilitamos toda la información y les acompañamos en el proceso para que se les garantice una plaza pública de proximidad.
Este año en motivo de la renovación de conciertos educativos hemos lanzado la campaña desconcertades.cat donde presentábamos un plan para ir progresivamente reduciendo las plazas privadas concertadas para reducir la sobreoferta y la segregación escolar.
Se pueden consultar todas nuestras campañas, estudios e iniciativas en affac.cat
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