Por Javier F. Ferrero
Susana Díaz se quita parcialmente la máscara y poco a poco muestra que está decidida a disputar a Pedro Sánchez la Secretaría General del PSOE en el 39 Congreso del partido si no consigue ser investido presidente del Gobierno antes del 2 de mayo. Sánchez ya se vio obligado a responder a la cuestión en rueda de prensa:«Tengo a Susana mucho aprecio, la respeto y creo que está haciendo un buen trabajo al frente de la Junta de Andalucía, pero, insisto, es ella quien tiene que responder a esa pregunta, no yo».
Pedro aparenta día a día más debilidad, desde el final de la sesión de investidura no ha conseguido fecha para más reuniones y parece que no la va a haber, y se han bloqueado muchas posibilidades de gobierno con la izquierda debido a su insistencia en priorizar un pacto con Ciudadanos que debería saber que le perjudicaría. Obviamente, la realidad aritmética se impuso y la suma de PSOE y C’s no acabó con la elección del lider socialista como presidente del Gobierno. Sin embargo, sigue adelante el pacto Sanchez-Rivera que parece que cada día se desinfla un poco más. Lo último fue la imputación al líder del PSOE gallego, José Ramón Gómez Besteiro, por seis nuevos delitos y la presión de Ciudadanos al respecto. Recordemos que esta imputación debilita a Pedro Sánchez al tratarse de un barón afín a él (y no hay muchos). Da la impresión de que empiezan los problemas en el paraiso del centro.
Sin embargo, Pedro Sánchez ha tocado poder y la lucha por la secretaría puede ser descarnada. El líder socialista parece que está decidido a mantener el calendario del 39 Congreso, pero algunos barones quieren retrasarlo porque consideran que no va a ser un congreso de trámite. Varios secretarios generales están presionando a Sánchez a fin de que aplace el duelo con Susana Díaz hasta después del 26-J. Pedro no quiere apearse y comentó en una entrevista en la Ser que «la fecha del Congreso está decidida: es el 8 de mayo. Es una decisión colegiada que tomamos todos los compañeros» y esta decisión solo puede ser revocada en otra reunión del máximo órgano entre congresos que no va a convocar si no le obligan a ello.
Según algunos medios, Susana Díaz anunciará su candidatura a liderar el PSOE en menos de 15 días y, aunque solo son especulaciones, lo cierto es que se ve con poder para ello y con el apoyo de gente poderosa dentro del partido. Su liderazgo, si llega, se verá marcado por su negativa a pactar con Podemos y las fuerzas del cambio con el apoyo incondicional de Felipe González. Por lo tanto, si la actual presidenta de la Junta de Andalucía llega a gobernar, nos espera un gobierno de teórico centro o de gran coalición con el PP.
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