Azerbaiyán está tratando de obtener un mandato para llevar a cabo un genocidio o una limpieza étnica en Nagorno Karabaj, incluso con la firma de Armenia. Naturalmente, también es una línea roja para nosotros
Por Diario Armenia
El primer ministro Nikol Pashinyan brindó una conferencia de prensa el 14 de marzo en la que se refirió a las actuales negociaciones con Azerbaiyán y al conflicto de Artsaj (Nagorno Karabaj).
“A mediados de febrero enviamos nuestros comentarios sobre el posible borrador del tratado de paz a Azerbaiyán, y hace 2 o 3 días recibimos los comentarios de Azerbaiyán sobre nuestro borrador. Vemos algunos avances. Pero cuanto más progreso vemos, más problemas fundamentales surgen. Primero, vemos que Azerbaiyán está tratando de formular demandas territoriales o aspiraciones de Armenia a través de un posible acuerdo sobre el establecimiento de la paz y el establecimiento de relaciones diplomáticas. Esa es una línea roja para nosotros”, declaró Pashinyan. “Con las propuestas de ese texto, Azerbaiyán está tratando de obtener un mandato para llevar a cabo un genocidio o una limpieza étnica en Nagorno Karabaj, incluso con la firma de Armenia. Naturalmente, también es una línea roja para nosotros”.
“Azerbaiyán sigue una línea tal que ni siquiera tenemos un sistema de garantías para la ejecución del tratado firmado, que también es una línea roja para nosotros porque hoy tenemos un documento escrito y firmado que no es implementado. Se trata del comunicado tripartito del 9 de noviembre de 2020. Según esa declaración, el Corredor de Lachin no debería haber sido cerrado, pero está cerrado. Esto enfatiza aún más que cualquier documento que se firme debe tener garantías de implementación, preferiblemente internacionales. Todo eso está ausente”, agregó el Primer Ministro.
“Hemos dicho que la cuestión de los derechos y la seguridad del pueblo de Nagorno Karabaj es extremadamente importante para nosotros, es uno de nuestros objetivos clave. Nuestra percepción es la siguiente: sería correcto que el pueblo de Nagorno Karabaj sea el titular principal del mandato de este tema. Creemos que la conversación principal debe darse entre Bakú y Stepanakert. Los procesos nos llevan a la conclusión de que no se podrá avanzar sin mecanismos y garantías internacionales porque en Munich, el presidente de Azerbaiyán dijo que existe un acuerdo de que se debe discutir el tema de los derechos y garantías de los armenios de Karabaj. Después de eso, se llevaron a cabo reuniones en la sede de las fuerzas de mantenimiento de la paz rusas en Nagorno Karabaj. Después de esas reuniones, de repente quedó claro que Azerbaiyán se ofrece a discutir el tema de la integración. El problema no son las palabras, sino el contenido, y es la práctica de Azerbaiyán no mantenerlas continuamente”.
“Cuando transferimos un documento del tratado de paz a Azerbaiyán en febrero, era una versión del documento que estaba listo para firmar. Fue, digamos, el 14 de febrero, lo que significa que estaba listo para firmar ese documento en la tarde de ese día o la mañana del 15, o en Múnich. No firmé porque Azerbaiyán no estaba de acuerdo con esa versión”, relató el Primer Ministro.
“La retórica agresiva de Azerbaiyán aumentó constantemente. Aumentó antes de la guerra de 2020, después de ella, y creo que sí, ahora hay una probabilidad muy alta de escalada tanto a lo largo de la frontera de Armenia como en Nagorno Karabaj”, advirtió el Primer Ministro. “Estamos convencidos y sabemos al 100% que no es Armenia la que inicia acciones agresivas; esta es la razón por la que Armenia decidió invitar a observadores de la Unión Europea”.
“El presidente de Azerbaiyán estuvo de acuerdo en presencia de todos, luego rechazó esa opción. Azerbaiyán nos acusó de tener un ejército en Nagorno Karabaj. Dije que no tenemos un ejército en Nagorno Karabaj. Propuse invitar a observadores internacionales a Nagorno Karabaj, dejar que evalúen la situación en el lugar y que presenten un informe. Azerbaiyán rechazó esta opción. Incluso hoy, creo que la comunidad internacional debería registrar que el riesgo de una escalada es muy alto. Y teniendo en cuenta el cierre del Corredor de Lachin y la existencia de una crisis humanitaria en Nagorno Karabaj, así como los evidentes preparativos de Azerbaiyán para llevar a cabo una limpieza étnica, nuestra posición sigue siendo que sería una buena oportunidad para enviar una misión de investigación a Nagorno Karabaj y al Corredor de Lachin”, agregó Pashinyan.
“El factor más importante aquí es la voluntad del pueblo de Nagorno Karabaj de vivir en su propia patria. En general, esto es de lo que estamos hablando. Azerbaiyán está tratando de quebrantar la voluntad del pueblo de Nagorno Karabaj de vivir en su patria. Si esa voluntad permanece firme, es la base de todos los eventos posteriores. Si alguien piensa que se puede quebrantar la voluntad del pueblo armenio de tener un estado independiente, no lo creo. Debemos mostrar nuestra voluntad de tener un estado soberano independiente. Es muy importante que percibamos y evalúemos aquellas acciones encaminadas a debilitar la voluntad de tener un estado independiente, soberano, que en todos los casos tienen una fuente externa. No existe tal fuente dentro de Armenia. Si existen tales manifestaciones, tienen una fuente externa”, dijo Nikol Pashinyan. El día anterior, todos los partidos de la Asamblea Nacional de Artsaj (Nagorno Karabaj) emitieron un comunicado en conjunto en el que exigieron a Nikol Pashinyan “no cuestionar la autodeterminación” del pueblo de Artsaj.
La seguridad de Armenia y Artsaj: “El garante de la seguridad de Nagorno Karabaj es Rusia”
Más adelante, el Primer Ministro se refirió a la Organización del Tratado de Seguridad Colectiva (OTSC): “Cuando el presidente de la OTSC visitó Armenia en 2020, me dijo que existe el temor en la OTSC de que Armenia abandone el organismo. Respondí que ese miedo no es apropiado, que el temor que existe en Armenia es apropiado: es decir, que la OTSC va a dejar a la República de Armenia. Mi evaluación es que la OTSC está dejando la República de Armenia voluntariamente o no, y eso nos preocupa”. El día anterior, Pashinyan mantuvo una conversación con el presidente ruso Vladimir Putin, a quien le aseguró que su canciller Ararat Mirzoyan participará de una futura reunión con representantes de Rusia y Azerbaiyán, algo que había sido rechazado en diciembre de 2022 debido al bloqueo de Azerbaiyán al Corredor de Lachin.
“¿Por qué firmé la declaración tripartita del 9 de noviembre de 2020? Por una simple razón: en esa situación, Armenia no podía ser garante total de la seguridad de Nagorno Karabaj; por lo tanto, era necesario crear un sistema que garantizara la seguridad de Nagorno Karabaj. Según la declaración tripartita y la posterior decisión del Consejo Federal de Rusia, que permite al presidente ruso enviar tropas a Nagorno Karabaj, todo esto ha dejado constancia de que Rusia es el garante de la seguridad de Nagorno Karabaj. No porque Armenia lo rechace, sino porque, lamentablemente, Armenia no puede cumplir plenamente esta función debido a la derrota en la guerra de los 44 días. Por lo tanto, juntando todos estos argumentos, cabe señalar que el garante de la seguridad de Nagorno Karabaj es Rusia. Por otro lado, hay un ejército de defensa en Nagorno Karabaj, que Azerbaiyán intenta presentar como el ejército de Armenia. Armenia no tiene un ejército en Nagorno Karabaj. Si no existiera un peligro evidente de genocidio y limpieza étnica para los armenios de Nagorno Karabaj, Nagorno Karabaj no necesitaría un ejército, al menos en esa escala. Se gastan miles de millones para mantener este ejército en Nagorno Karabaj en esta difícil situación. La existencia del Ejército de Defensa de Nagorno Karabaj es la mayor evidencia de los preparativos de Azerbaiyán para un genocidio y una limpieza étnica”.
Artsaj pidió garantías internacionales para negociar con Azerbaiyán
Ese mismo día, la Cancillería de Artsaj emitió un comunicado “en respuesta a la propuesta de la Oficina del Presidente de Azerbaiyán de celebrar una reunión entre los representantes de Azerbaiyán y Artsaj”.
“Reiteramos que la República de Artsaj está comprometida con su posición expresada anteriormente de que tales reuniones pueden celebrarse con la mediación de la contingente ruso de mantenimiento de la paz, en el mismo lugar que el 1º de marzo de 2023, para discutir cuestiones humanitarias, técnicas y de infraestructura, sin politización indebida. Al mismo tiempo, enfatizamos que el bloqueo del Corredor de Lachin y la crisis humanitaria en curso son inaceptables y no contribuyen a la creación de un entorno propicio para las negociaciones. Estamos convencidos de que Azerbaiyán debe cumplir adecuadamente sus obligaciones en virtud de la declaración trilateral del 9 de noviembre de 2020 y la orden de la Corte Internacional de Justicia, absteniéndose del uso o la amenaza de la fuerza y los enfoques maximalistas unilaterales. Solo en ese caso, se pueden crear condiciones favorables para futuras discusiones”, remarcó la Cancillería de Artsaj.
“En cuanto a las cuestiones políticas de la solución del conflicto Azerbaiyán-Karabaj, reiteramos que Artsaj está comprometida con las negociaciones encaminadas a una solución integral del conflicto, que debe llevarse a cabo dentro de un formato acordado y reconocido internacionalmente, con garantías internacionales para la igualdad de derechos de los partes y cumplimiento de las obligaciones asumidas”.
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