“Este es el último de una larga lista de ataques aéreos injustificables llevados a cabo por la Coalición liderada por Arabia Saudita en lugares como escuelas, hospitales, mercados, bodas y prisiones”. – Ahmed Mahat, jefe de la misión de Médicos Sin Fronteras en Yemen
Ahmed Abdulkareem
En una escena plagada de caos y llanto, voluntarios y un equipo de rescate sacaron el martes los cuerpos de 91 prisioneros de los escombros de la prisión preventiva de la ciudad de Sa’ada en el sur de Yemen. Temprano el viernes pasado por la mañana, aviones de combate de los Emiratos Árabes Unidos (EAU) apoyados por los Estados Unidos atacaron la prisión superpoblada, que alberga hasta 3.000 reclusos de todo Yemen y África. El ataque fue uno de los más mortíferos desde que comenzó la guerra en 2015. Al menos 91 personas murieron y más de 236 resultaron gravemente heridas en los ataques, que dejaron en estado de shock a las familias en duelo en Yemen y África.
Los testigos describen la escena del ataque en sus primeros minutos como caótica y trágica. Se escucharon aviones de combate sobre los cielos de Saada mientras la gente dormía, antes de que se escucharan tres violentas explosiones desde la prisión, fuegos rojos mezclados con polvo y humo iluminaban los escombros voladores. Los cuerpos de los prisioneros alimentaron el infierno mientras los gritos y lamentos de los que sobrevivieron al ataque inicial resonaron en los edificios bombardeados. Se espera que aumente el número de muertos, ya que muchas víctimas del ataque permanecen en estado crítico y los hospitales luchan por hacer frente a la falta de suministros médicos como resultado del asedio impuesto por la Coalición Saudita que comenzó en 2015.
“El hospital se enfrenta a una situación muy difícil… con heridos tirados en el suelo [del hospital]”, mientras los rescatistas siguen rebuscando entre los escombros en busca de supervivientes, dijo Médicos Sin Fronteras en un comunicado . El Ministerio de Salud de Yemen ha lanzado un llamamiento urgente al extranjero para enviar ayuda médica y médicos a Yemen, ya que los hospitales ya están llenos de víctimas de ataques aéreos anteriores, así como un llamamiento urgente a los ciudadanos yemeníes para que donen sangre. A pesar de que la Coalición liderada por Arabia Saudita negó tener conocimiento del ataque, las organizaciones internacionales, incluidas las Naciones Unidas, la Cruz Roja Internacional y Médicos sin Fronteras, confirmaron que la Coalición era responsable.
El portavoz del secretario general de la ONU, Antonio Guterres, Stephane Dujarric, dijo que el jefe de la ONU condenó los ataques aéreos de la Coalición liderada por Arabia Saudita contra un centro de detención en la ciudad de Saada. Médicos Sin Fronteras calificó el ataque aéreo de “injustificable” y dijo que Arabia Saudita y sus aliados “no tienen forma de negar que se trata de un ataque aéreo; todos en la ciudad de Saada lo escucharon”. “Este es el último de una larga lista de ataques aéreos injustificables llevados a cabo por la Coalición liderada por Arabia Saudita en lugares como escuelas, hospitales, mercados, bodas y prisiones”, dijo Ahmed Mahat, jefe de la misión de Médicos Sin Fronteras en Yemen. dijo tras el ataque.
Una serie de ataques mortales.
El ataque, que se produjo después de que el Consejo de Derechos Humanos de la ONU votara para poner fin al mandato del Grupo de Expertos Eminentes sobre Yemen, el único organismo internacional e independiente encargado de investigar el alcance total de las violaciones en la guerra, no fue el único ataque que tuvo lugar. lugar esta semana. Más de 14 personas, en su mayoría mujeres y niños, murieron cuando aviones de combate respaldados por Estados Unidos atacaron la casa de un ex oficial militar de alto rango en Sana’a. Y el viernes, al menos seis civiles, incluidos varios niños, murieron y 18 resultaron heridos después de que aviones sauditas bombardearan un centro de comunicaciones en Hodeidah. Las autoridades locales recuperaron los cuerpos de las víctimas, que en su mayoría eran niños que jugaban cerca del edificio. El ataque, que derribó un edificio de tres pisos, tuvo como objetivo la infraestructura de Internet de Yemen en un intento probable de sofocar los informes sobre el ataque de la Coalición Saudita a la prisión.
Una respuesta militar rápida y furiosa
Los ataques provocaron ira en Yemen y en todo el mundo. El viernes, multitudes masivas salieron a las calles de Yemen no solo para condenar el ataque a la prisión y el reciente bombardeo de la Coalición de Saada, Sana’a y al-Hodeida, sino también para culpar a Estados Unidos por apoyar a los regímenes de Riyadh y Abdu Dhabi. Los manifestantes también apelaron al Ejército de Yemen dirigido por Ansar Allah para buscar venganza por los recientes ataques. En represalia por los ataques, el Ejército de Yemen, dirigido por Ansar Allah, lanzó operaciones militares contra Arabia Saudita y los Emiratos Árabes Unidos. Apodada “Operación Huracán Yemen”, las operaciones vieron una ráfaga de misiles balísticos y ataques con aviones no tripulados contra la Coalición liderada por Arabia Saudita. El lunes , las fuerzas yemeníes lanzaron ataques masivos con grandes misiles balísticos Zulfiqar y drones Sammad-3 contra objetivos sensibles en los Emiratos Árabes Unidos y Arabia Saudita, incluida la base aérea Al-Dhafra al sur de Abu Dhabi, donde están estacionadas las fuerzas estadounidenses. Dos mil soldados estadounidenses en Al-Dhafra se refugiaron en búnkeres durante el ataque, que pretendía ser una advertencia a Estados Unidos de que su continuo apoyo a Arabia Saudita ya no es aceptable y podría enfrentarse con ataques directos, dijo un alto rango de Ansar. El oficial militar de Alá le dijo a MintPress . Otros sitios en Abdu Dhabi y Dubai fueron atacados, mientras que escuadrones de drones de combate Sammad-1 y Qasef-2K (Striker-2K) atacaron varios campamentos militares de la Coalición liderada por Arabia Saudita en Sharurah, una ciudad en la región sur de Arabia Saudita de Najran.
El ataque es el segundo en los Emiratos Árabes Unidos. El primero tuvo lugar el 17 de enero y tuvo como objetivo sitios sensibles, incluidos tanques de petróleo en el área Musaffah ICAD 3, además de un sitio de construcción en el Aeropuerto Internacional de Abu Dhabi. A pesar del aumento de los ataques de la Coalición contra Yemen, los ataques de represalia de Yemen fueron denunciados por los aliados de la Coalición, incluida la administración Biden (que actualmente está considerando volver a designar a Ansar Allah como una organización terrorista, una medida que podría tener efectos devastadores en un país ya de por sí). Yemen hambriento) y el Consejo de Seguridad de la ONU. Incluso Israel proclamó su apoyo a los Emiratos Árabes Unidos. Ninguno de los mencionados ha condenado aún a Arabia Saudí por el ataque a la prisión ni por otras violaciones de derechos humanos cometidas en Yemen. La realidad ahora es que las condenas no significan nada para los muchos yemeníes que creen que la escalada militar es la única forma efectiva de disuadir a Arabia Saudita y los Emiratos Árabes Unidos. Según declaraciones de Sana’a, los ataques de represalia no cesarán, sean cuales sean las denuncias, y se extenderán hasta que EAU se retire del país. “Los Emiratos Árabes Unidos ya no estarán a salvo. Hacemos un llamado a las empresas e inversores extranjeros para que se vayan por el bien de su seguridad”, ha repetido el Ejército de Yemen en todas sus declaraciones sobre el tema. Foto destacada | La gente mira los cuerpos cubiertos de las víctimas de un ataque aéreo de la coalición liderada por Arabia Saudita en la provincia de Saada, en el norte de Yemen, el 22 de enero de 2022. Hani Mohammed | AP Ahmed AbdulKareem es un periodista yemení residente en Sana’a. Cubre la guerra en Yemen para MintPress News, así como para los medios locales yemeníes.
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