En una carta abierta (1966) de 25 trabajadores científicos, literarios y artísticos soviéticos, expresaron sus opiniones sobre la responsabilidad de Stalin de no estar preparado para la guerra.
Por Ana GT
Los líderes de los tres países de la alianza anti-Hitler: Gran Bretaña, Estados Unidos y la Unión Soviética. A pesar de la hostilidad ideológica, los líderes de la Unión Soviética, Gran Bretaña y Estados Unidos lograron establecer una alianza anti-Hitler y abrieron un segundo frente en 1944.
Durante las reuniones con los líderes de los países de la Unión (Churchill visitó Moscú del 12 al 16 de agosto de 1942 y del 9 al 18 de octubre de 1944, negoció con Charles de Gaulle del 2 al 8 de diciembre de 1944, Conferencia de Teherán, Conferencia de Yalta), Stalin declaró que era un diplomático firme y duro. El 4 de enero de 1943, la revista estadounidense «Time» nombró a Stalin «Hombre del año».
Bajo la orden de Stalin, Churchill y Roosevelt fueron llevados desde el aeropuerto de Saki a lo largo de la ruta a través del campo de batalla hasta el lugar de reunión en Yalta para que los líderes aliados pudieran ver el impacto total de la guerra de la Unión Soviética.
Durante la reunión, Roosevelt admitió que estaba sorprendido por la vista de las montañas de Crimea. Muchos partidos y organizaciones comunistas a menudo deben la victoria de la Gran Guerra Patria a Joseph Stalin, porque fue él quien dirigió la Unión Soviética y derrotó al nazismo con los aliados en ese momento.
Esta declaración también se difundió activamente durante el período soviético. Al mismo tiempo, algunos políticos, figuras científicas, culturales y artísticas, historiadores, sociólogos, veteranos y representantes del Patriarca de Moscú creen que el triunfante no sucedió por Stalin.
En una carta abierta (1966) de 25 trabajadores científicos, literarios y artísticos soviéticos, expresaron sus opiniones sobre la responsabilidad de Stalin de no estar preparado para la guerra. En 2010, el presidente ruso Dmitry Medvedev también declaró que la victoria de la Gran Guerra Patria pertenece al pueblo, no a Stalin, aunque en 2012 cambió de opinión: ‘Esta es la victoria de todo el país, incluyendo el liderazgo, no importa lo que sea, no importa cómo lo veamos. Esta sigue siendo su victoria. No solo la victoria del pueblo, sino también las decisiones tomadas en ese momento’.
Además, muchos autores acusaron a Stalin de que el Acuerdo Soviético-Alemán en 1939 ignoraba la advertencia de inteligencia de que Alemania está a punto de atacar a la Unión Soviética y la supresión del Ejército Rojo en 1937-1938.
Stalin como comandante.
Según las memorias de G.K. Zhukov, no mucho antes de la guerra, Stalin convenció a Zhukov y Timoshenko de que no había mucha amenaza, porque la Unión Soviética se dividió más en la frontera que Alemania.
Cuando los comandantes informaron que, según los datos de inteligencia, todas las divisiones alemanas tenían personal y armado de acuerdo con las condiciones de la guerra, casi el doble del tamaño de la Unión Soviética, Stalin respondió con dureza: ‘No se puede confiar en toda la inteligencia’.
Además, Stalin no trajo información sobre datos de inteligencia al comando militar, pensando que solo él sabía lo que necesitaban saber. Cuando Jruschov levantó la cabeza del texto e hizo gestos de entusiasmo: ‘Y Stalin, lideró el frente del mundo», todos guardaron silencio, incluidos los líderes militares. Tienen algo que decir, no en contra.
En general, se cree que Stalin tiene un liderazgo militar excelente. Como enfatizó Zhukov, Stalin demostró ser un «organizador sobresaliente» en el apoyo a las operaciones, el establecimiento de reservas estratégicas, la organización de la producción de equipo militar y todo lo necesario para la línea del frente.
Sin embargo, existe una gran brecha entre el liderazgo organizativo y militar. El párrafo anterior de Zhukov contradice otros párrafos de sus memorias: ‘IV Stalin no se adhirió a las leyes básicas del arte de la estrategia de guerra’ (sobre la batalla de Stalin en el apogeo de Kursk) Y dijo además: ‘Es como un boxeador gruñón, a menudo emocionado y ansioso por unirse a la pelea. La empresa conjunta entusiasta y apresurada de Stalin no siempre consideró correctamente el tiempo requerido para la preparación completa para la acción’.
Por supuesto, cualquier crítica y cuestionamiento del genio de los líderes militares estalinistas en la era de Stalin será severamente castigado como agitación derrotista, pro-fascista y calumnia despreciable contra los líderes del partido del gobierno.
La evaluación de Stalin en el libro G.K. Zhukov publicado después de la renuncia de Jruschov es bien conocida: ‘Puedo decir con certeza que la empresa conjunta de Stalin tiene los principios básicos de organizar las operaciones de primera línea y las operaciones de grupo de primera línea, y las dirige con conocimiento y es muy consciente de los principales problemas estratégicos … En el liderazgo de La lucha armada, en resumen, la mente natural de Stalin, la experiencia del liderazgo político, la rica intuición y el amplio conocimiento ayudaron a Stalin. Sabía encontrar el eslabón principal en una situación estratégica, apoderarse de él, contrarrestar al enemigo y llevar a cabo una acción ofensiva u otra. No hay duda de que es un comandante supremo bien merecido’.
Al mismo tiempo, considerando los antecedentes de la publicación del libro, vale la pena señalar que después de que Jruschov renunció, la tendencia pro-Stalin de Brezhnev y otros se intensificó. En teoría, también se puede usar para tales publicaciones.
El almirante Kuznetsov, comandante de la marina durante la Gran Guerra Patriótica, dijo: ‘Está mal decir que es un hombre ignorante que está llevando a cabo guerras a escala global, pero no puedo dejar de mencionar sus errores militares, no, yo lo haría. Le gustaría escuchar que los comandantes no son capaces … él puede hacer arreglos para aterrizar en Kerch sin discutir los medios necesarios y las condiciones de preparación de antemano … puramente voluntarios’.
Señaló que estaba donde él sabía, todos los líderes militares que se reunieron con Stalin están de acuerdo con la evaluación de Zhukov sobre él, que Stalin es «un comandante supremo bien merecido», aunque al mismo tiempo «todos tienen una pregunta: ¿Por qué cometieron errores cuando la Alemania nazi podría comenzar a atacarnos?.
Kuznetsov primero enfatizó que la voluntad de acero de Stalin jugó un papel decisivo en su opinión. Según Kuznetsov, durante la Batalla de Moscú, Stalin recogió reservas para el contraataque con una perseverancia asombrosa y lo puso en práctica. Parece que la victoria cerca de Moscú, en esas condiciones, es irreal y posible.
Una situación similar, señaló Kuznetsov, se desarrolló en Stalingrado. En ese momento, de acuerdo con la decisión del cuartel general y Stalin, la reserva fue obstinadamente arrastrada a la zona de guerra, lo que posteriormente determinó el resultado de la batalla.
Kuznetsov enfatizó que bajo el tremendo papel de los comandantes que ejecutaban el plan de combate, la idea del cuartel general y la voluntad del Comandante en Jefe Supremo determinaban el éxito o el fracaso de la batalla.
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