Artículo de Sara Outeiral. Durante todo el proceso judicial dan ganas de echarse atrás, pero no lo hagáis, es un camino amargo pero debemos visibilizar la situación del sistema y ayudarnos unas a otras en momentos como este.
El “feminismo revolucionario” debe cuestionar todos los aspectos de la tradición feminista incorporados por la presión cara los medios de comunicación o por mero paternalismo.