La empresa alemana Tönnies, la mayor productora de carne de Europa, está reclutando a refugiados ucranianos en la frontera con Polonia bajo salarios de miseria.
Cuando hablamos de refugiados tenemos que relacionarlos con el capitalismo y su necesidad imperiosa de saquear las riquezas de cualquier país que no se someta sumisamente.
«No son refugiados, son víctimas del imperialismo»
El Presidente de Bielorrusia, Alexander Lukashenko, subrayó la importancia de evitar enfrentamientos y denunció que los refugiados vienen de países arruinados por la coalición occidental liderada por EEUU».
El Partido Comunista de Bielorrusia señala a las guerras imperialistas de EEUU, la UE y la OTAN como el detonante de la crisis migratoria en sus fronteras.
El régimen bielorruso es el enemigo cuya amenaza hay que combatir, y las necesidades alimenticias, de cobijo y de seguridad de los refugiados no son más que una cortina de humo del problema real.