
La lucha de las mujeres durante el franquismo
El régimen franquista aplicó para las mujeres la máxima nazi de las tres “K”: Kinder, Küche und Kirche (niños, cocina e Iglesia) y concedió a la Sección Femenina de la Falange el control de la educación y del entretenimiento de las niñas y las jóvenes. La iglesia tenía en Acción Católica otro de los mecanismos de dominio sobre la población femenina y en el Patronato de Protección de la Mujer, un organismo que ha pasado casi desapercibido y que funcionaba como auténtico correccional, un poder sobre las jóvenes “caídas”, que eran todas aquéllas que no se adaptaran a lo establecido por el nacionalcatolicismo.