
Matanza de Atocha. La Historia y la Verdad no prescriben
Pusieron contra la pared a los ocho abogados y al auxiliar y se desencadenó el terror de las balas a poco más de medio metro de distancia. Fueron tantos los disparos que al principio se creyó que utilizaban metralletas. José Fernández Cerrá y Carlos García Juliá apretaron el gatillo, mientras Fernando Lerdo de Tejada vigilaba desde la puerta. Contaron con la complicidad de Leocadio Jiménez Caravaca que les facilitó las armas y Gloria Herguedas, novia de Fernández Cerrá. […]