Como en muchos estados herederos de la URSS, importantes comunidades nacionales quedaron dentro de un estado que no siempre reconocía sus derechos y su cultura, lo que ha generado no pocos conflictos.
Una nueva chispa ha prendido en Asia Central, entre dos países pertenecientes a la Organización del Tratado de Seguridad Colectiva (OTSC), Kirguistán y Tayikistán, a la que también pertenecen Rusia y Armenia.
la participación en las recientes elecciones de Kirguistán, que no llega al 32% del electorado, la más baja de la historia del país, no augura un panorama político muy halagüeño en el país centro asiático.
Mientras Afganistán se revuelve en el lodo preciosamente amasado por los Estados Unidos durante veinte años, a pocos kilómetros de sus fronteras, una nueva escalada, estalló esta última semana en el viejo conflicto entre Kirguistán-Tayikistán.