Es obvio que Israel y Estados Unidos van a seguir impulsando las revueltas y disponen de un número no insignificante de agentes dentro de Irán dispuestos a todo para dar la vuelta a la república islámica.
Cuando un operativo político exiliado que vive en Washington sale de la naftalina y se une a sus antiguos enemigos, significa que hay una connivencia de fuerzas por una causa común.
Desde finales del conflicto con Armenia del 2020, Bakú comenzó una lenta, pero progresiva diferenciación con Teherán, llegando al punto de incluir en mapas del “Gran Azerbaiyán” provincias del noroeste del país persa, donde existe una población de origen azerí.
“La lucha armada es solo una parte de nuestra fuerza que también incluye acciones civiles, sociales y democráticas. Por supuesto, si el Estado comete masacres no nos quedaremos de brazos cruzados”
El denominado Baluchistán se extiende en el 44 por ciento del territorio pakistaní, el este de Irán y el sur de Afganistán. En Irán, totalizan el dos por ciento de la población del país, con menos de un millón y medio de habitantes.