Juan Carlos I no solo ha cometido una incontable cantidad de delitos económicos, de los que ya pocos dudan, sino que ellos se han producido con las armas de por medio.
Nuevo artículo de Víctor Chamizo en su columna «Al pan, pan y al vino, vino» en la Semana Republicana de Nueva Revolución. Montaje de Bezerradas Nocturnas