Entre las acciones protagonizadas por la partida de Cesar Terrón destacan incautaciones económicas en San Martín de Moreda y La Bustarga, la liberación de José Fernández Pérez o el ajusticiamiento del cura de Fresnedo.
Considerado un gran jurista, que aportaba un lado humano a la Justicia, en el año 2004 es designado para la Sala de lo Social del mismo Tribunal Superior.
La huelga general revolucionaria estalla el viernes 5 de octubre y los obreros toman posiciones en Páramo del Sil, asaltando el cuartel de la Guardia Civil.