Por Puño en Alto
El chantaje teatralizado y mantenido -hasta el último minuto- por la ultraderecha a no apoyar los presupuestos andaluces, puso al gobierno andaluz y, en concreto, al vicepresidente de la Junta de Andalucía, Juan Marín, al borde de un ataque de nervios, fundamentalmente al ver su estatus -nunca antes imaginado- en verdadero riesgo.
En todas las imágenes de aquellos días, se podía ver a Juan Marín con la cara como una puerta desencajada, sudando la gota gorda con la camisa que que no le llegaba al cuello, hasta que el portavoz de la ultraderecha montaraz en el parlamento, cuasi perdonando la vida a Moreno y a Marín, dio marcha atrás retirando su enmienda a la totalidad a los presupuestos andaluces. El respiro de alivio fue tan grande que -en lo más parecido a un gesto de genuflexión, de sumisión y agradecimiento- Marín rindió pleitesía al amo que lo había perdonado, que afortunadamente fue recogida en una foto que pasará a los anales de la desvergüenza política.
La pleitesía de Marín se ha traducido en una considerable merma en las partidas presupuestaras en inversiones contra el desempleo, entre otras, así como con el trágala de la terminología de violencia intrafamiliar contra la mujeres y no violencia de género como hasta ahora.
Igualmente, no se le ha visto nada molesto e incómodo y si pronto dispuesto a justificar y restar importancia a la penúltima metedura de pata del impresentable Consejero de Sanidad, Jesús Aguirre, cuando dijo aquello de «lo fácil es llegar y el chupetón» en referencia a las mujeres que deciden optar por su derecho al aborto. Por cierto, ¿a qué esperan PSOE y Adelante Andalucía para exigir la dimisión del Consejero de Sanidad y, en su caso, presentar la reprobación en el Parlamento?
Tampoco se le ha visto incómodo con las manifestaciones en redes sociales del presidente del grupo parlamentario, el ultraderechista Francisco Serrano, sobre la sentencia a la Manada del Tribunal Supremo. El exjuez Serrano, defendió los argumentos de la defensa al considerar que la sentencia del Supremo está «cargada de condicionantes mediáticos y políticos«, «altera todas las garantías constitucionales» y está «dictada por la turba feminista supremacista«.
Juan Marín, conocido en su ciudad natal, Sanlúcar de Barrameda, en tono jocoso como «el andaluz de pro» y por ser independiente hasta de sus propias ideas, no se ha sentido en modo alguno incómodo, probablemente porque no hay que enfadar a quien sustenta de facto su gobierno y de hecho a su estatus personal. Y es que para Juan Marín, no hay nada que una más que seguir chupando de la mamandurria de lo público, o como suele decir en confianza «si hay que ir se va y si hay que arrodillarse hasta terminar con las rodillas encalladas, se hace, porque con las cosas de comer no se juega«.
Por cierto, el considerado todopoderoso y monolítico, Clan de la Manzanilla de Juan Marín, ya no es tan clan ni tan monolítico. En los mentideros políticos se dice que hay graves disensiones en el grupo que está llegando hasta la dirección actual de Cs en Sanlúcar de Barrameda. Marín no estuvo en el Pleno de Constitución de la Corporación el pasado día 15 de Junio, si estuvo Elena Sumariva, su mano derecha, quien pasó absolutamente desapercibida y desatendida por su antiguos compañeros.
Pero a buen seguro es que la común mamandurria de lo público de todos, servirá para restañar diferencias y cerrar heridas.
No es el primer articulo que leo de su «puño» y letra donde critica a Ciudadanos.
Luego leo el resto de sus articulos y en seguida me doy cuenta que divaga usted por la izquierda, esos que sueñan con la utopia de algún dia poder gobernar cuando ni siquiera tienen un programa serio de gobierno. Reconocer que esto les viene grande y dejarlo en manos de profesionales sería lo coherente.
Marín es un gran politico, ni fulano ni mengno llegarían a donde a llegado él. Ha trabjado mucho en política para llegar a donde está y, gracias a eso, se acabó en Andalucía el chiringuito que Susanita Diaz tenia instalado.
Ciudadanos ha sido un partido coherente en todos los sentidos: tenía claro su propósito desde que empezó en esto y era la de cambiar las cosas y lo está haciendo. No es fácil, criticar desde fuera si lo es.
Y no lo digo yo,lo dicen los hechos: la última prueba es el apogeo que ha tenido en las ultimas elecciones donde los resultados demuestran el auge de este partido, el realce de la congruenca de la ciudadanía española.
Habla usted de Serrano. Le recuerdo que ha tenido que darse de baja porque la manipulación mediática ha sido tal que no ha podido resistirlo, precisamente eso corrobora lo de la existencia de esa turba feminista supremacista: no solo han hecho que un hombre tenga que quedarse en casa por un inocente comentario sino que además han permitido que otros cinco hombres inocentes estén en la carcel. Es respecto a eso con lo que hay que sentirse incómodo. La izquierda siempre hablando de injusticias pero no veo a la izquierda incomodarse.
Critica usted a Aguirre, que defiende el derecho a la vida. ¿Es que eso también le parece perjuicioso? Claro que Marín no ha dicho nada al respecto de estas declaraciones, pero por una elemental razón: porque tiene claro que el derecho a la vida es algo innato y algo legítimo para todo ser humano, al igual que la libertad del individuo de expresar sus opiniones y practicar sexo con una mujer que ya lo había consentido.
Viendo la animadversión que desprende sus palabras, no parece que sea Juan Marín el de la cara desencajada. El odio va junto a la envidia, supongo.
Juan Marín lleva comiendo de la sopa boba de lo público desde 2007. Dijo que en aquellas elecciones que no gobernaría con nadie y al día siguiente negocio con el PSOE. Cuando dejó el Ayuntamiento de #Sanlúcar para presentarse a las autonómicas, dejó una deuda de 153 millones de euros. Se conoce que defiende a Marín de oídas, llevado por el agradecimiento de algo concreto, es el normal proceder de quienes le rodean, es decir, estómago agradecido.
Subió todos los impuestos y privatizó todos los servicios susceptibles de privatizar para abandonarlos a su suerte. Y curiosamente mientras permitía que se impusiera sanciones urbanísticas astronómicas en Sanlúcar, presuntamente disfrutaba de una vivienda ilegal con piscina construida en suelo rustica en la localidad de Chipiona.
En cualquier caso, si para defender lo indefendible sobre Juan Marín, tiene que poner en valor al impresentable Serrano y a sus comentarios y afirmar que los delincuentes de las Manada son inocentes, flaco favor le hace a su idolatrado Marín.
Del mismo modo, para Marín el derecho a la vida no es algo innato ni legitimo, ya que durante su cogobierno con el PSOE en el Ayuntamiento de Sanlúcar de Barrameda, ni se preocupó ni ocupó de los cientos de familias que diariamente el Ayuntamiento desatendía y que tenían que acudir a la beneficencia para poder obtener algo de llevar de comer a sus hijos, ya natos.
Créame no es animadversión, solo es diversión ver como perrea a la ultraderecha montaraz para seguir con la mamandurria de lo público.
Por último, curioso que en la defensa numantina que hace de Juan Marín no haya desmentido los problemillas de comunicación y relación en el seno del llamado Clan de la Manzanilla.
Le dejo dos enlaces muy curiosos:
– La dirección de Vox reprende a Serrano mientras Marín lo justifica: https://amp-elmundo-es.cdn.ampproject.org/v/s/amp.elmundo.es/espana/2019/07/01/5d18fd11fc6c83082b8b460e.html?amp_js_v=0.1#referrer=https%3A%2F%2Fwww.google.com&_tf=De%20%251%24s&share=https%3A%2F%2Fwww.elmundo.es%2Fespana%2F2019%2F07%2F01%2F5d18fd11fc6c83082b8b460e.html
– Jesús Aguirre se disculpa, mientras Marín, lo comprende: https://andaluciainformacion-es.cdn.ampproject.org/v/s/andaluciainformacion.es/barbate/835290/aguirre-pide-disculpas-por-referirse-al-aborto-como-chupeton-/amp/?usqp=mq331AQA&_js_v=0.1#referrer=https%3A%2F%2Fwww.google.com&_tf=De%20%251%24s&share=https%3A%2F%2Fandaluciainformacion.es%2Fbarbate%2F835290%2Faguirre-pide-disculpas-por-referirse-al-aborto-como-chupeton-%2F