La mutilación genital femenina es una de las practicas más brutales contra los derechos humanos de las mujeres que existen. Una “tradición” milenaria que aun a día de hoy en el S.XXI se sigue practicando en diferentes países del sur global, incluso del norte, aunque si bien es cierto, en los países occidentales se hace de manera clandestina, ya que existen leyes que prohíben totalmente esta tortura de los cuerpos de las niñas.
Cabe decir que es un ritual cultural, no religioso. No existe en el Corán o en cualquier otro libro sagrado ninguna indicación que diga que esto ha de hacerse a las niñas. Aunque poco importa si es un ritual cultural o religioso, ya que en ambos casos el Patriarcado es quien dicta las normas; normas que siempre, siempre, en todas partes del mundo, en todas las culturas, en todas las tradiciones, en mayor o menor grado, la misoginia se hace palpable. Ejemplos hay muchos, a parte de la MGF, tenemos a las mujeres birmanas(Myanmar) con los cuellos de jirafa, los pies vendados de las mujeres chinas, las violaciones correctivas para “curar” el lesbianismo, por no mencionar los matrimonios forzados, los crímenes contra el honor, el matrimonio infantil, la prueba del pañuelo en la etnia gitana, la idolatría a la virginidad de la mujer que determina su honra, dignidad y pureza (esto es parte también de la cultura religiosa católica entre otras en países desarrollados de occidente), y así un largo etc. de culturas y tradiciones misóginas a lo largo y ancho del mundo.
En este artículo me centraré en la mutilación genital femenina (MGF) por centrarnos en uno en concreto ya que el tema es harto amplio como para poder abordar otras tradiciones patriarcales contra las mujeres.
Según las OMS, la MGF se define como todos los procedimientos en la resección parcial o total de los órganos genitales externos femeninos por razones que nada tienen que ver con una práctica médica. El único motivo de realizar esta resección es por una cuestión cultural dentro de las comunidades que la practican. La MGF no solo está reconocida como una violación de los Derechos Humanos de las niñas y de las mujeres, es también una manera bestial y bárbara de representar la desigualdad entre hombres y mujeres. Viola los derechos a la salud, a la seguridad, a la integridad física y a no ser sujeto de torturas degradantes, incluso al derecho a la vida ya que en muchos casos la niña o la mujer que es sometida a esta tortura acaba muerta.
Los momentos críticos dentro del ciclo vital de una niña en el que corre más riesgo de ser víctima de la MGF son el nacimiento, la lactancia, durante la infancia, las niñas en la pubertad y adolescencia, en especial en el momento de la primera menarquía (primera menstruación); y de manera ocasional en la edad adulta.
Según datos de la OMS, 3 millones de niñas al añocorren el riesgo de ser víctimas de MGF, y más de 200 millones de niñas y mujeres viven mutiladasgenitalmente en la actualidad en 30 países de África, Oriente Medio y Asia. Aunque la MGF es un problema de escala mundial ya que los flujos migratorios hacen que en países del Norte Global haya mujeres procedentes de estos territorios y que por ende sus hijas puedan verse sometidas a la práctica mutiladora de manera clandestina.
Normalmente el ritual lo lleva a cabo una mujer con la participación de otras mujeres de la comunidad. Suele ser una mujer de referencia dentro del grupo de iguales que tiene el reconocimiento y el prestigio como una autoridad femenina sabia y experta en realizar el ritual de la mutilación. Cabe decir que, aunque es una práctica que realizan las mujeres sigue siendo un rito patriarcal porque éste se realiza por mandato de los hombres; son los hombres quienes ancestralmente instauraron dicha práctica y que las mujeres acatan, ya que de ello depende su aceptación en la comunidad, porque de otro modo serian repudiadas por su familia y los hombres. Hablamos de culturas donde la única misión en la vida de las mujeres es casarse y ser madre; si no están mutiladas, son consideradas impuras y ello las hace indignas de contraer matrimonio; son apartadas en el mejor de los casos, o expulsadas de su comunidad en el peor.
TIPOS DE MUTILACIÓN GENITAL FEMENINA
Tipo I “clitoridectomía”: Extirpación parcial o total del clítoris y del prepucio.
Tipo II “excisión”: Extirpación parcial o total del clítoris y de los labios menores.
Tipo III “infibulación”: Extirpación total del clítoris, del prepucio, de los labios menores y además se cosen los labios mayores por encima de la uretra y la entrada de la vagina (infibulación).
Tipo IV “infibulación total”: Extirpación total del clítoris, del prepucio, de los labios menores y además se cosen los labios mayores por encima de la uretra y la entrada de la vagina dejando una mínima apertura para poder expulsar la orina y los fluidos menstruales (infibulación total).
La siguiente imagen ilustra de manera clara los 4 tipos de MGF
COMPLICACIONES PARA LA SALUD
Las complicaciones y los riesgos para la salud de las mujeres y niñas que han sido sometidas a la MGF son múltiples y varían según el grado de gravedad del procedimiento que se ha llevado a cabo, según sea el tipo 1, 2, 3 o 4. Entre ellas destacan:
- Dolores intensos
- Hemorragias
- Infecciones, fiebres altas
- Tétanos
- Shock, Estrés postraumático
- Problemas urinarios, infecciones de orina
- Múltiples trastornos psicológicos
- Problemas vaginales
- Problemas menstruales
- Problemas sexuales (coito doloroso)
- Complicaciones en el parto
- Mortalidad neonatal
- A las mujeres a las que se les ha practicado la mutilación tipo 3 es necesario que se les haga un corte con el fin de ensanchar la abertura vaginal para hacer posible el coito y el parto (desinfibulación). A menudo la zona genital de estas mujeres es cosida en diferentes ocasiones tras dar a luz; con lo que se ven sometidas a aperturas y cierres repetidamente aumentando así para ellas mayores riesgos para su salud, además de ser una terrible tortura que no cesa en toda la edad fértil de la mujer.
- MUERTE
POR QUÉ LA PRÁCTICA DE LA MUTILACIÓN GENITAL FEMENINA:
Factores culturales y sociales
Cabe decir que las razones por las que la MGF se lleva a cabo es diferente según la región, y según la época en la que se producen; aunque siempre están vinculados a factores socioculturales de las comunidades donde se practica.
La MGF es una norma social establecida que ejerce una presión sobre las personas para que esto ocurra con el fin de una aceptación social y por evitar el rechazo de la comunidad y del grupo de iguales; son estas dos razones las más fuertes las que hacen que se perpetúe la práctica de mutilar genitalmente a niñas y mujeres; razones y motivaciones que por su fuerte arraigo en las comunidades hacen que no se cuestionen ni se permitan las voces discordantes.
La MGF es considerada como parte necesaria en el proceso vital de las niñas con el fin de prepararlas para “su misión” en la adultez: ser madre y esposa.
La mutilación genital de las niñas se practica para encajar en los cánones de lo que se considera una conducta sexual honrosa ya que, de ese modo, con el sellado de la vagina y la extirpación del clítoris se asegura la virginidad antes de contraer matrimonio, y también para asegurar la fidelidad dentro de él. Esto solo sucede con las mujeres dado que se realiza en contextos donde el proyecto vital de ellas se reduce a contraer matrimonio y ser madre, y estar genitalmente mutiladas aumenta las probabilidades de casarse puesto que va asociado a modelos culturales de feminidad en los que el recato y la pureza de las niñas las hace hermosas porque han eliminado de su cuerpo las partes impuras que no son propias de la mujer (el placer sexual es considerado un atributo únicamente masculino).
Esto es porque dentro de estas comunidades existe la creencia de que la mutilación genital de las mujeres reduce la libido de éstas, reduce las probabilidades de mantener relaciones sexuales extramatrimoniales o fuera del matrimonio, y hace que la práctica del sexo no sea placentera. Si la mutilación es de tipo 3 (sellado/estrechado de la abertura vaginal), el miedo al dolor que causa su apertura y la vergüenza al descubrimiento hacen que las mujeres temerosas no practiquen sexo fuera del matrimonio ni que se planteen una infidelidad. Podría decirse que es un “cinturón de castidad” bestial y torturador.
Es importante decir que no hay escritos religiosos que recojan la MGF como mandato divino, aunque estas comunidades piensen que a ojos de Dios esto es deseable para las mujeres, legitimando así una práctica torturadora y misógina que somete a las mujeres mediante el uso del “temor de Dios”, y que es pilar de una sociedad patriarcal donde las religiones son un brazo de ésta para someter a las personas, y en especial a las mujeres, como sucede siempre, esgrimiendo así estas razones del temor a Dios, para su mantenimiento. Aunque dentro de los líderes religiosos de estas comunidades hay diferentes posturas al respecto. Hay quienes la fomentan, otros son indiferentes a ella y otros, afortunadamente, trabajan por su erradicación.
LA COMUNIDAD INTERNACIONAL ANTE LA MGF
La OMS, UNICEF y la UNFPA, en 1997 se declararon conjuntamente contra la Mutilación Genital Femenina. Desde entonces se ha luchado incansablemente contra la MGF tanto a nivel de trabajo en las comunidades, como a través de la investigación e implementando políticas públicas. Todo ello ha hecho que haya habido progresos a nivel tanto internacional, nacional como local para revertir esta realidad tan penosa que afecta a mujeres a escala mundial haciendo que cada vez más países adopten medidas encaminadas a la erradicación de la MGF y aumentando el número de mujeres y hombres que se declaran en contra de esta práctica dentro de las comunidades que ancestralmente venían realizándola.
ESPAÑA, VALENCIA, UNIDAD DR PESET
En nuestro país, en la ciudad de València, en el Hospital Doctor Peset, la Consellería creó la Unidad de Referencia para la Cirugía Reconstructiva de la Mutilación, en junio de 2016. En su web http://doctorpeset.san.gva.es/mgfse pueden encontrar recursos útiles para la concienciación, la divulgación de información en materia de la MGF, así como para su detección y prevención:
- Protocolo de actuación sanitaria ante la Mutilación Genital Femenina http://www.san.gva.es/mutilacion-genital-femenina
Esta Unidad de Referencia se dedica al seguimiento y tratamiento integral de las mujeres víctimas de MGF. Las mujeres afectadas que así lo deseen reciben asistencia especializada en esta materia por parte de un equipo humano multidisciplinar formado en Psicología, Sexología y Ginecología para así poder abordar y hacer frente a las consecuencias nefastas que para la salud de estas mujeres tiene el haber sido mutiladas, con un tratamiento personalizado y adecuado a cada caso.
La Unidad de Referencia para la Cirugía Reconstructiva de la Mutilación del Hospital Dr. Peset tiene también el compromiso de trabajar activamente por la prevención de esta práctica a niñas nacidas o residentes en nuestro territorio y pertenecientes a etnias de países donde la MGF está arraigada.
MARIAMA
Me gustaría finalizar este artículo de temática tan dura con un poco de esperanza a través de este corto de animación, realizado por Mabel Lozano. Una historia de la vida real, con nombre de niña, y desde una perspectiva diferente que apela directamente al poder que tienen los hombres para acabar con estas prácticas torturadoras hacia las mujeres y niñas de sus países.
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