“Estoy esperando que llegue enero para reencontrarme con el resto de mis compañeros, verlos otra vez y por supuesto, representar a mi selección, a mi país”.
Uno de los futbolistas más importantes dentro de la selección nacional de Cuba es el defensa central Carlos Vázquez. “Cavafe”, como le conocen, fue uno de los siete jugadores que no pudo estar con la absoluta en los dos partidos amistosos efectuados recientemente frente a Nicaragua, por problemas ajenos a su voluntad.
Deseoso de formar parte nuevamente del proyecto comandado por Pablo Elier Sánchez, el jugador nacido en nuestro país, pero formado como jugador en España siguió cada detalle sucedido dentro y fuera de cancha. “Viví cada partido con mucho nerviosismo, pero me mantuve apoyando siempre a todos mis compañeros”, comentó el jugador en exclusiva para Cubahora.
Tras sumar una victoria (3-0) y una derrota (2-0) ante el elenco pinolero, el jugador del Bergantiños FC reconoció que “ahora no debemos quedarnos con los resultados, sino con los aspectos positivos y negativos de ambos encuentros”.
“Estos son partidos amistosos, que sirven sobre todo para coger rodaje y poder seguir compenetrándonos, y al mismo tiempo coger automatismo todos juntos. No hay que ser ni triunfalistas en la victoria, ni dramáticos en la derrota”.
“Al fin y al cabo, esto se trata de un proceso que comenzó en marzo. Ya habrá que centrarse en los resultados cuando vengan las competiciones oficiales”.
Carlos Vázquez reconoció estar deseoso de volver a vestir la elástica del país que lo vio nacer en 1999. “Estoy esperando que llegue enero para reencontrarme con el resto de mis compañeros, verlos otra vez y por supuesto, representar a mi selección, a mi país”.
Desde que fue convocado un grupo considerable de jugadores cubanos radicados en el extranjero, no cabe dudas que el nivel cualitativo de la selección antillana ha aumentado ostensiblemente.
Erigido en muy poco tiempo como uno de los jugadores más mediáticos en nuestro país, y uno de los nombres más queridos ahora mismo por la afición de casa, Cavafe se ha convertido en uno de los artífices de estos logros.
Le hace mucha ilusión jugar por Cuba, lo ha expresado en reiteradas ocasiones el zaguero antillano de apenas 22 años. “Representar a mi país es un anhelo que siempre he transmitido, es una bonita experiencia, y más, en nuestra tierra. Ojalá pronto pueda hacerse realidad ese sueño también”
(Tomada del perfil de Facebook del Bergantiños)
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