La organización obrera había constatado a principios de julio de ese año que seguía habiendo un crecido número de chicos menores de catorce años en las fábricas en jornadas de ocho horas o más cuando las necesidades de la producción exigían hacer horas extraordinarias.
Por Eduardo Montagut | 31/12/2023
La Federación Obrera de la Industria del Calzado se puso en marcha en 1929 para conseguir que se hiciera una inspección a la localidad alicantina de Elda sobre el trabajo de los menores en esa industria, tan característica de la zona.
Esas gestiones tuvieron éxito y el inspector provincial giró una visita dando órdenes oportunas para que los menores de edad no trabajasen más de seis horas diarias. Al parecer, la orden fue, en principio, respetada, y algunos patronos la terminaron por aceptar, pero la organización obrera había constatado a principios de julio de ese año que seguía habiendo un crecido número de chicos menores de catorce años en las fábricas en jornadas de ocho horas o más cuando las necesidades de la producción exigían hacer horas extraordinarias, llegando, por lo tanto, a trabajar una hora más.
Las quejas públicas de la Federación generaban malestar entre la patronal, pero también es cierto que la misma organización no tuvo ningún reparo en rectificar cuando se equivocaba, como fue el caso de una fábrica concreta de la que se había informado en El Socialista que sus dueños habían rebajado el jornal y se había demostrado que no era cierto.
La Federación lamentó públicamente que muchos empresarios se incomodaran con estas informaciones, pero la misma se reafirmaba en que seguiría ocupándose de esta situación y hasta con más frecuencia, denunciando todo aquello que estuviera fuera de la razón, bien por parte de los industriales, bien de los encargados, lamentándose de que no entendieran que ellos también eran asalariados. La Federación pedía públicamente a los empresarios del calzado de Elda que moderasen su conducta con los trabajadores porque de ese modo no habría censuras que realizar. Seguimos, pues, con nuestro objetivo de mostrar las distintas realidades obreras de la España de antes de la Guerra Civil.
Hemos consultado el número 6369 de El Socialista, de 9 de julio de 1929.
Se el primero en comentar