La guerra que se detuvo pero no terminó

Aunque la declaración de alto el fuego del 9 de noviembre reconoce a Nagorno-Karabakh como una entidad, así como la línea de contacto entre Azerbaiyán y Artsakh y el corredor de Lachin, las acciones de Aliyev tras el final de la guerra de 2020 demuestran que está eludiendo sus responsabilidades en virtud del acuerdo trilateral

Por Hranoush Dermoyán / EVN Report

Hace dos años, el 27 de septiembre, los armenios de Artsakh (Nagorno-Karabakh) y Armenia se despertaron con noticias de guerra . Hoy, 27 de septiembre, los armenios de Armenia y Artsakh se acostarán previendo una nueva guerra.

El statu quo de dos décadas, que defendía una frágil estabilidad en el sur del Cáucaso, se hizo añicos en la mañana del 27 de septiembre de 2020 cuando las Fuerzas Armadas de Azerbaiyán lanzaron una guerra a gran escala contra Artsakh . En los dos años transcurridos desde entonces, Armenia ha estado tratando de negociar con Azerbaiyán de buena fe en un intento por establecer la paz y poner fin a su bloqueo de décadas y reintegrarse a la región, pero Azerbaiyán continúa utilizando implacablemente las amenazas y la agresión para conseguir lo que desea. quiere.

Los armenios en Artsakh y la República de Armenia viven bajo la constante amenaza de guerra. Desde el alto el fuego del 9 de noviembre de 2020, el presidente de Azerbaiyán, Ilham Aliyev, ha demostrado constantemente que no quiere estabilidad ni cooperación en la región, y que no tiene la intención de dejar a los armenios en paz. La evidencia más reciente de esto fue el asalto al territorio soberano de Armenia el 13 y 14 de septiembre de 2022, que dejó a Armenia con más de 200 muertos y desaparecidos, más de 280 heridos y otros 20 prisioneros de guerra armenios en cautiverio azerbaiyano. La horrible mutilación de mujeres militares armenias y la circulación de fotos de soldados armenios asesinados y mutilados en las redes sociales de Azerbaiyán son un claro recordatorio de la continua armenofobia y deshumanización de los armenios en Azerbaiyán patrocinada por el estado.

En el momento de la publicación, han pasado exactamente dos semanas desde la reciente agresión de Azerbaiyán contra Armenia, pero la amenaza de guerra aún se cierne sobre el país. La guerra que comenzó el 27 de septiembre de 2020 nunca terminó.

El presidente de Azerbaiyán, Ilham Aliyev, está tratando de crear la impresión de que quiere negociar con Armenia y construir la paz, pero al mismo tiempo usa la fuerza para lograr sus objetivos. A pesar de que Bakú y Ereván están involucrados en conversaciones sobre múltiples vectores con la UE, Rusia, así como en negociaciones mediadas por Estados Unidos, Aliyev está abierto sobre el hecho de que tiene reclamos territoriales sobre Armenia.

Aunque la declaración de alto el fuego del 9 de noviembre reconoce a Nagorno-Karabakh como una entidad, así como la línea de contacto entre Azerbaiyán y Artsakh y el corredor de Lachin, las acciones de Aliyev tras el final de la guerra de 2020 demuestran que está eludiendo sus responsabilidades en virtud del acuerdo trilateral. .

Khtsaberd, diciembre de 2020: Azerbaiyán invade Artsakh después de la guerra

Más de un mes después del alto el fuego negociado por Rusia el 9 de noviembre de 2020, las Fuerzas Armadas de Azerbaiyán ingresaron a las regiones de Hin Tagher y Khtsaberd en Nagorno-Karabakh, capturando a 64 militares armenios y áreas que no debían estar bajo su control según el alto el fuego. . La declaración trilateral estipuló que las áreas a las que habían llegado las tropas azerbaiyanas el 9 de noviembre estaban bajo el control de Azerbaiyán, pero Hin Tagher y Khtsaberd estaban fuera de esas áreas.

Al recuperar el control de las siete regiones que rodean Nagorno-Karabakh, incluidas Shushi y Hadrut, que no formaban parte de Azerbaiyán, Bakú comenzó a enmarcar las disputas fronterizas con Armenia como si estuvieran en el mismo nivel legal y conceptual que la frontera de Armenia con Artsaj. En diciembre de 2020 , las Fuerzas Armadas de Azerbaiyán avanzaron hacia un tramo de 21 km de la carretera Goris-Kapan de Armenia y colocaron carteles que decían «Bienvenido a Azerbaiyán». La narrativa de Azerbaiyán fue que algunos tramos de la carretera pasaban por su territorio y estaba estableciendo control sobre ellos.[1]

Dos meses después de la Guerra de Artsaj de 2020, Armenia y Azerbaiyán iniciaron el proceso de implementación de la declaración trilateral del 9 de noviembre. Tres temas están en la agenda: la apertura de enlaces de comunicación regionales, la demarcación y delimitación de la frontera entre Armenia y Azerbaiyán, y la firma de un tratado de paz entre los dos países. Los dos últimos puntos también implican el reconocimiento de la integridad territorial de cada uno; mientras que Armenia afirma que Bakú y Ereván se reconocieron mutuamente la integridad territorial en 1992 cuando se unieron a la Comunidad de Estados Independientes liderada por Rusia, Bakú niega esta afirmación y exige que Armenia reconozca su integridad territorial, incluida Artsakh.

El 11 de enero de 2021, el primer ministro de Armenia, Nikol Pashinyan, el presidente de Azerbaiyán, Ilham Aliyev, y el presidente de Rusia, Vladimir Putin, celebraron su primera reunión trilateral después de la guerra y firmaron otra declaración trilateral.que se centró en el artículo 9 de la declaración del 9 de noviembre: la apertura de las comunicaciones regionales. El comunicado detalló la creación de un grupo de trabajo de los viceprimeros ministros de los tres países, que sostendrá discusiones sobre la apertura de enlaces regionales de comunicación. Aunque el grupo ha celebrado reuniones periódicas durante los últimos dos años, no se han logrado resultados tangibles. Se ha hecho evidente que por «apertura de las comunicaciones regionales», Azerbaiyán significa forzar un corredor extraterritorial a través de Armenia que une el territorio continental de Azerbaiyán con su enclave de Nakhichevan, sin ninguna jurisdicción armenia sobre él. Los funcionarios armenios han anunciado una y otra vez que dicho corredor no está sujeto a negociación.

Sev Lich, mayo de 2021: Azerbaiyán ocupa territorio armenio para “aclarar fronteras”

En medio de conversaciones en curso sobre la apertura de enlaces de comunicación regionales, el 12 de mayo de 2021, las Fuerzas Armadas de Azerbaiyán lanzaron otra incursión, avanzando 3,5 kilómetros en el territorio soberano de Armenia en la región de Syunik, cerca de Sev Lich (Lago Negro) Al día siguiente, el 13 de mayo, las fuerzas azerbaiyanas intentaron una vez más avanzar sus posiciones militares hacia el territorio armenio en la región de Gegharkunik, cerca de Vardenis y en Syunik, cerca de Sisian, con la excusa de “aclarar” las fronteras estatales. El 21 de mayo, los soldados azerbaiyanos cruzaron la frontera con Armenia cerca del pueblo de Khoznavar, que está cerca de Sev Lich. En ese momento, aproximadamente 1000 soldados azerbaiyanos habían cruzado al territorio armenio.

Para resolver la escalada de primavera, el primer ministro Nikol Pashinyan abogó por la retirada de las fuerzas armadas de Armenia y Azerbaiyán de la frontera y el despliegue de mecanismos de seguridad por parte de actores internacionales como condición previa para comenzar el proceso de demarcación y delimitación de la frontera. Pero las acciones posteriores de Azerbaiyán demostraron que no quería ningún mecanismo de seguridad fronteriza.

Durante el verano de 2021, las fuerzas armadas de Azerbaiyán violaron el alto el fuego con Armenia y Artsakh e intentaron incursionar en las fronteras oriental y occidental de Armenia. La situación se intensificó nuevamente en septiembre, cuando el 10 de septiembre Azerbaiyán instaló puestos policiales en varios tramos de la carretera Goris-Kapan dentro de los territorios de Armenia y comenzó a verificar documentos y exigir tarifas de tránsito a los camioneros iraníes que pasaban por sus puestos de control.

En ese momento, Pashinyan anunció que en diciembre de 2020, las Fuerzas Armadas armenias se habían retirado a la frontera de la Armenia soviética para evitar otra escalada militar, y agregó que se había llegado a un acuerdo para que los vehículos armenios tuvieran libre acceso a las carreteras que pasaban por el control de Azerbaiyán. aun cuando no se había discutido el tema de los vehículos extranjeros en ese tramo de la vía. Pashinyan también declaró que las acciones de Azerbaiyán probablemente fueron una respuesta a la negativa de Armenia de otorgar el llamado corredor Zangezur.

Ishkhanasar, noviembre de 2021: Demarcación de la frontera a través de la fuerza

El 9 de noviembre de 2021, exactamente un año después de que terminara la guerra de 44 días en Artsakh, las Fuerzas Armadas de Azerbaiyán intentaron avanzar cerca de Sev Lich, pero se retiraron después de encontrar resistencia de las fuerzas militares armenias. A la medianoche del día siguiente, las fuerzas azerbaiyanas instalaron puestos de control aduanero en el tramo de 21 km de la carretera Goris-Kapan que atravesaba el territorio controlado por Azerbaiyán; Las autoridades de Armenia aconsejaron al público utilizar la carretera alternativa Tatev-Aghvani. Después de estos eventos, Pashinyan anunció que no era posible insistir en que no hubiera controles fronterizos sobre los ciudadanos armenios y la carga porque, a cambio, Azerbaiyán exigía un corredor soberano que uniera Azerbaiyán con su enclave Najicheván.

Cinco días después, el 15 de noviembre, Azerbaiyán colocó otro puesto de control en la carretera Kapan-Chakaten, separando a Kapan de seis pueblos cercanos (Chakaten, Srashen, Shikahogh, Tsav, Shishkert y Nerkin Hand). Para llegar a Kapan desde Chakaten, los residentes ahora tienen que cruzar 130 km, mientras que antes eran solo 36 km.

Los eventos se intensificaron en una ofensiva azerbaiyana a gran escala en la frontera oriental de Armenia en la región sur de Syunik el 16 de noviembre de 2021. El ataque duró casi cinco horas y finalmente se detuvo gracias a la mediación rusa.

Después de la ofensiva, Pashinyan anunció que, desde mayo de 2021, Azerbaiyán había ocupado 41 kilómetros cuadrados del territorio soberano de Armenia; La excusa de Bakú es afirmar que la frontera entre Armenia y Azerbaiyán no ha sido demarcada y que esos territorios pertenecen a Azerbaiyán.

Al comentar sobre el uso de la fuerza por parte de Azerbaiyán para iniciar el proceso de demarcación de la frontera durante la 77ª sesión de la Asamblea General de la ONU el 22 de septiembre de 2022, el primer ministro Pashinyan anunció: “Una de las excusas de Azerbaiyán sobre las razones por las que han hecho esto [atacar a Armenia en noviembre de 2021]- fue que Armenia, según ellos, se niega a formar una comisión de delimitación de fronteras. Por supuesto, no nos negamos a hacer eso, sino que solo insistimos en que, simultáneamente, se debería establecer un mecanismo de seguridad fronteriza. Al final, de acuerdo con la solicitud de nuestros socios internacionales, quienes argumentaron que el trabajo de la comisión fronteriza en sí mismo será un factor confiable para la seguridad fronteriza, acordamos comenzar el trabajo”.

“Paz” temporal: Comienzan las negociaciones

Después de esta ofensiva, cuando el presidente ruso, Vladimir Putin, facilitó una reunión entre Pashinyan y Aliyev el 26 de noviembre de 2021, las escaramuzas fronterizas continuaron hasta que se estableció una paz relativa en la frontera entre Armenia y Azerbaiyán. Con la tercera declaración negociada de Moscú , las partes acordaron implementar mecanismos de demarcación y delimitación para fin de año. Las partes también lograron avances en el impedimento de los problemas humanitarios y se discutió en detalle la apertura de rutas regionales de comunicación.

Tras esa reunión, el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, organizó otra reunión trilateral el 15 de diciembre en Bruselas. Según el sitio web oficial del primer ministro , se discutió el proceso de implementación de las declaraciones trilaterales del 9 de noviembre y el 11 de enero, así como los acuerdos alcanzados el 26 de noviembre. También se destacaron los pasos concretos para reducir las tensiones en la región y los pasos destinados a llevar a cabo la demarcación y delimitación de la línea fronteriza, así como la construcción de confianza mutua entre Armenia y Azerbaiyán.

En una declaración posterior a la reunión, Michel enfatizó que garantizar el distanciamiento adecuado de las fuerzas es un elemento esencial para la prevención de incidentes. También enfatizó la importancia de restaurar la infraestructura de comunicaciones entre Armenia y Azerbaiyán respetando plenamente la soberanía de todos los países.

Antes de que comenzara la reunión trilateral, Aliyev anunció durante una conferencia de prensa conjunta con el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, que si Armenia quiere que el corredor de Lachin permanezca sin puestos de control aduanero, entonces debería proporcionar las mismas condiciones para Azerbaiyán en el llamado corredor de Zangezur. Agregó que si Armenia se niega a dar libre acceso a Azerbaiyán al corredor de Zangezur, este último colocará puestos de control aduanero en el corredor de Lachin.

Después de las dos reuniones trilaterales facilitadas por Moscú y Bruselas, se estableció otra fase de negociación y una paz relativa, a pesar de las violaciones ocasionales del alto el fuego. Es difícil decir cuánto cambió el curso de los acontecimientos en el sur del Cáucaso el ataque de Rusia a Ucrania el 24 de febrero de 2022, pero su impacto se sintió de inmediato.

Diplomacia a través de la guerra

Además de utilizar la fuerza militar contra el territorio de Armenia y la población armenia de Artsakh para promover sus intereses, Ilham Aliyev también recurre a las amenazas y la guerra psicológica. En febrero de 2022, en el transcurso de varios días, las Fuerzas Armadas de Azerbaiyán estacionadas cerca de los asentamientos armenios en Artsakh reprodujeron grabaciones amenazantes en altavoces que pedían a los armenios que se fueran o recurrirían a la violencia.

Luego de los mensajes amenazantes, el principal gasoducto de Armenia a Artsakh fue “dañado” en circunstancias aún no aclaradas el 8 de marzo de 2022, cuando Artsakh estaba experimentando un clima frío sin precedentes. Los armenios de Artsakh se quedaron sin gasolina durante más de una semana. La suposición general de la parte armenia es que Azerbaiyán estuvo detrás de la explosión del gasoducto. Después de reparar el gasoducto y restablecer el suministro de gas el 18 de marzo, las autoridades de Azerbaiyán instalaron una válvula que permitirá controlar la transferencia de gas a Artsaj. Azerbaiyán volvió a cortar el suministro de gas a Artsakh el 21 de marzo y lo restableció una semana después.

El 24 de marzo, las Fuerzas Armadas de Azerbaiyán atacaron la aldea de Parukh en Artsakh, donde estaban estacionadas las fuerzas de paz rusas.

La escalada de marzo en Artsakh fue seguida por una segunda reunión trilateral entre Charles Michel, Nikol Pashinyan e Ilham Aliyev en Bruselas el 6 de abril. Durante la reunión de 4,5 horas, las partes acordaron establecer una Comisión Fronteriza Conjunta, encargada de delimitar la frontera. entre Armenia y Azerbaiyán, y garantizar una situación de seguridad estable en la frontera. Los líderes armenios y azerbaiyanos también acordaron instruir a sus ministros de Relaciones Exteriores para que trabajen en un futuro tratado de paz, que abordaría todos los asuntos restantes. También discutieron la restauración de las comunicaciones entre Armenia y Azerbaiyán en particular y en el sur del Cáucaso en general.

El 22 de mayo, Pashinyan y Aliyev se reunieron para su tercera reunión en Bruselas, facilitada nuevamente por Charles Michel. En un comunicado de prensa emitido después de la reunión, Michel describió las conversaciones como “francas y productivas” y señaló que se discutió todo el conjunto de temas de la agenda armenio-azerbaiyana, incluidos los temas fronterizos, la conectividad y el acuerdo de paz entre Armenia y Azerbaiyán. Al comentar sobre la reunión unos días después, el ministro de Relaciones Exteriores de Azerbaiyán, Jeyhun Bayramov , dijo a los periodistas que fue muy constructiva, exitosa y contribuyó al proceso de normalización de las relaciones con Armenia después de la guerra de 44 días. Según Bayramov, las partes ahora están trabajando para abrir rutas de comunicación entre los dos países;también agregó que las partes discutieron las diferentes posiciones que tienen y lograron acercarlas.

Dos días después de la reunión de Bruselas, el 24 de mayo, las comisiones fronterizas de Armenia y Azerbaiyán se reunieron por primera vez en un lugar no identificado en la frontera entre Armenia y Azerbaiyán para discutir los aspectos técnicos de la comisión fronteriza conjunta.

Cuando parecía que las negociaciones avanzaban, las Fuerzas Armadas de Azerbaiyán lanzaron nuevamente una ofensiva contra Artsakh el 1 de agosto, esta vez con el pretexto de luchar contra “grupos militares armenios ilegales en su territorio”. Dos días después, Azerbaiyán detuvo sus hostilidades, las autoridades de Artsaj revelaron que la ruta del corredor de Lachin cambiaría en cuestión de semanas. Según el comunicado trilateral del 9 de noviembre, la ruta del corredor no cambiaría hasta dentro de un año y medio. Además, se entregarían tres aldeas armenias, Aghavno, Sus y Berdzor.a los azerbaiyanos. El 30 de agosto, las fuerzas de paz rusas fueron reasignadas a una carretera temporal (que conecta Armenia con Artsakh) y se espera que el último corredor esté terminado en mayo de 2023.

Una vez más, mediante el uso de la fuerza, Ilham Aliyev obtuvo lo que quería, eludiendo una vez más el acuerdo del 9 de noviembre e interpretándolo a su antojo. Si bien Aliyev pudo resolver el problema del corredor de Lachin en un cronograma que le convenía, los funcionarios azerbaiyanos continuaron anunciando que todavía hay formaciones militares ilegales en Nagorno-Karabaj. Está claro que Bakú quiere lograr la disolución total del Ejército de Defensa de Artsaj. Dada la evidente inacción de las fuerzas de paz rusas, el Ejército de Defensa de Artsaj es el único garante de seguridad que queda para los armenios de Artsaj. En estas circunstancias y dado el historial de Aliyev de lograr lo que quiere mediante el uso de la fuerza, parece inevitable otro ataque contra Artsakh .

Luego de la escalada militar del 1 al 3 de agosto en Artsakh , Pashinyan, Aliyev y Michel se reunieron para la cuarta ronda de conversaciones en Bruselas el 31 de agosto. Luego de la reunión de cuatro horas, Pashinyan declaró que la discusión con Aliyev no fue fácil, pero que Armenia sigue comprometida con la agenda de paz.

Charles Michel señaló que las discusiones se centraron en los acontecimientos recientes en el sur del Cáucaso y las relaciones entre la UE y ambos países. Las partes acordaron intensificar el trabajo sustantivo para avanzar en el tratado de paz entre Armenia y Azerbaiyán y se encargó a los ministros de Relaciones Exteriores de los dos países reunirse dentro de un mes para trabajar en los proyectos de texto.

Un día antes de la reunión en Bruselas, la comisión fronteriza de Armenia y Azerbaiyán sobre delimitación y seguridad fronteriza se reunió en Moscú por segunda vez. El Ministerio de Relaciones Exteriores de Armenia informó que las partes discutieron cuestiones organizativas y de procedimiento, intercambiaron puntos de vista sobre la regulación de la actividad conjunta y el trabajo futuro de las comisiones.

Jermuk, septiembre de 2022: Azerbaiyán traslada la guerra a Armenia

Dos meses después del ataque a Nagorno-Karabakh a principios de agosto, Aliyev llevó su guerra a Armenia. Justo después de la medianoche del 13 de septiembre, las Fuerzas Armadas de Azerbaiyán atacaron casi toda la frontera oriental de Armenia, utilizando armas de fuego de diferentes calibres, morteros, lanzagranadas y vehículos aéreos no tripulados de combate. Como de costumbre, Aliyev culpó a Armenia por el ataque. Durante dos días de lucha, Armenia sufrió más de 200 militares muertos y desaparecidos y cuatro civiles muertos; y más de 7.000 personas fueron desplazadas. Azerbaiyán también atacó la infraestructura civil y los asentamientos dentro de Armenia.

En la noche del 14 de septiembre, la comunidad internacional, con la participación activa de EE. UU., negoció un alto el fuego. Al mismo tiempo, Aliyev continuó con su retórica amenazante. Una semana después de este alto el fuego, Aliyev advirtió a Armenia que no provocara a Azerbaiyán, de lo contrario, “responderían según sea necesario”. Aliyev advirtió a Armenia que piense con cuidado, ya que nadie puede hablar con Azerbaiyán con ultimátums y que Armenia no debe contar con nadie. Agregó que Azerbaiyán ha demostrado al mundo entero de lo que es capaz.

El líder azerbaiyano afirmó que Armenia no quiere la paz y que está retrasando el proceso de demarcación de la frontera, y agregó que Azerbaiyán posee mapas del siglo XX y más antiguos, según los cuales se debe realizar la delimitación y demarcación. También culpó a Armenia por no tomar medidas para abrir el llamado corredor Zangezur y por no retirar sus fuerzas armadas de Artsakh. Armenia ha dicho varias veces que las tropas armenias han abandonado Nagorno-Karabaj.

A pesar de los comentarios amenazantes de Aliyev, el ministro de Relaciones Exteriores de Azerbaiyán, Jeyhun Bayramov, anunció durante las reuniones de la Asamblea General de la ONU que Azerbaiyán está listo para avanzar con el tratado de paz entre los dos países “ a pesar de los recientes enfrentamientos ”.

En las circunstancias de los últimos dos años, el uso de la palabra “paz” por parte de los funcionarios azerbaiyanos es cínico y lleno de peligros para los armenios de Artsakh y Armenia.

Notas al pie:

[1] La carretera Goris-Kapan se construyó durante la época soviética cuando no había una frontera palpable entre las RSS de Armenia y Azerbaiyán. Cuando la Unión Soviética se derrumbó, las fuerzas armenias obtuvieron el control de los territorios que se convirtieron en parte de la República de Nagorno-Karabaj, incluidas las carreteras en disputa en la actualidad. Después de la Guerra de Artsaj de 2020, Armenia perdió el control de esos territorios y algunos tramos de la carretera Goris-Kapan quedaron bajo el control de Azerbaiyán.

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