El país heleno se ha convertido en una plataforma desde la que la OTAN y EE.UU brindan apoyo militar a guerras en Oriente Medio y Europa.
Por Redacción NR | 29/12/2024
Grecia se está convirtiendo en un chiringuito militar de Estados Unidos. El Partido Comunista de Grecia (KKE) advierte que ‘la transformación del país en un bastión de EE.UU y la OTAN continúa sin cesar, con el consentimiento de todas las partes del arco euroatlántico’.
Los sucesivos gobiernos, desde Syriza en 2018 hasta Nueva Democracia en la actualidad, han atado de manos al país con acuerdos militares (Diálogo Estratégico, Acuerdo de Bases) que dan luz verde a la OTAN para el uso de bases e infraestructuras en todo el territorio.
En definitiva, la política de defensa griega está totalmente supeditada a las necesidades bélicas de las fuerzas estadounidenses de la OTAN. Las bases estadounidenses en Grecia no sólo para almacenar armamento y como centros de aprovisionamiento y de entrenamiento sino que también son utilizadas para apoyar operaciones militares en Oriente Medio y el Mediterráneo.
Las instalaciones militares griegas comenzaron a construirse en el año 1952, mientras que las instalaciones de la OTAN, en 1955. La construcción de la mayoría de las instalaciones se completó en 1959 y el correspondiente acuerdo interestatal (MOU) entre Grecia y Estados Unidos se firmó en 1961.
La base en la bahía de Souda, situada en la isla de Creta, es actualmente una de las más importantes para Estados Unidos y la OTAN en el Mediterráneo. Cuenta con puertos y un aeropuerto y alberga a unas 1.000 personas. Un punto estratégico que está siendo utilizado para brindar apoyo táctico al régimen israelí para seguir adelante con el genocidio palestino.
Además, EE.UU tiene presencia en las bases de Stefanovikio, Larissa y Alexandroupolis. Por ejemplo, el puerto de Alexandroupolis es un punto clave de transbordo de armamento con destino a países de Europa del Este y al frente de guerra en Ucrania.
Los sucesivos gobiernos griegos alineados con el atlantismo están poniendo bajo un enorme riesgo a su propia población. En caso de una escalada bélica que diera lugar a un conflicto internacional, Grecia podría convertirse en objetivo militar legítimo, con unas terribles consecuencias.
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