Haitianos protestan por amenaza de intervención militar extranjera en el país

El 10 de octubre, bajo el lema “Abajo Ariel Henry, Abajo la ocupación extranjera”, cientos de miles de haitianos salieron a las calles de todo el país contra una resolución aprobada por el Primer Ministro de facto y Presidente interino, solicitando una intervención armada en Haití.

Por Tania Wadhwa | Peoples Dispatch

En la capital, Puerto Príncipe, miles de ciudadanos se reunieron en la comuna de Cité-Soleil y marcharon hacia la comuna de Pétion-Ville a través de la comuna de Delmas, exigiendo la renuncia incondicional de Henry y el fin de todo tipo de injerencia extranjera en los asuntos internos del país. . Los manifestantes levantaron consignas como “Estados Unidos es el problema, no puede ser la solución”.

En el cruce Delmas 40 B, los manifestantes fueron reprimidos brutalmente por la policía. Los policías utilizaron gases lacrimógenos y dispararon balas reales contra ellos. Según informes de medios locales, al menos un manifestante murió en la represión.

También se organizaron manifestaciones masivas similares en otras ciudades importantes. Las movilizaciones se llevaron a cabo como parte de las protestas de una semana contra la administración de Henry respaldada por Estados Unidos. El sábado 8 de octubre, diversas organizaciones de la sociedad civil, sindicatos y partidos de oposición de izquierda convocaron a acciones de protesta a nivel nacional contra la crisis multidimensional que enfrenta el país debido al desgobierno del gobernante Partido Haitiano Tèt Kale (PHTK) de extrema derecha. El 10 de octubre fue el primer día de las protestas a nivel nacional, que se extenderán hasta el próximo lunes 17 de octubre.

Durante las últimas siete semanas, desde el 22 de agosto, los haitianos se han estado movilizando incansablemente contra el aumento de la pobreza y la inseguridad alimentaria en medio del aumento vertiginoso de los precios de los productos básicos y los servicios básicos; aguda escasez de combustible en medio de un aumento brutal de los precios; secuestros, asesinatos y violencia generalizados relacionados con pandillas; y la aplastante devaluación de la moneda nacional, el gourde haitiano, frente al $USD.

Los manifestantes han criticado que durante el último año de liderazgo ilegítimo de Henry, la crisis económica, política y social se ha profundizado en el país. Muchos han denunciado que la activación de bandas criminales, tras el asesinato del presidente de facto del país, Jovenel Moïse, en julio de 2021, es parte de la estrategia de Henry para permanecer en el poder, donde fue puesto y retenido por EE.UU., la ONU, la OEA y el Grupo Núcleo. Varios también han declarado que el llamado abierto de Henry a una invasión extranjera, utilizando la violencia de las pandillas como pretexto y criminalizando los movimientos de personas que exigen su renuncia, proporciona una prueba más de sus intenciones.

Sin embargo, el pueblo haitiano ha subrayado que defenderá su soberanía, no permitirá otra ocupación extranjera y buscará por sí mismo una solución concreta a su situación. Han aclarado que la aplicación del Acuerdo de Montana es el fin último de su lucha. El Acuerdo de Montana aboga por la instalación de un gobierno de transición que gobierne el país durante dos años, con el fin de recuperar a la nación de la crisis institucional provocada por el PHTK, reconstruir la sociedad y organizar elecciones para el próximo gobierno.

El llamado de Henry a la intervención extranjera

La semana pasada, el 5 de octubre, Henry, al dirigirse a la nación, manifestó su intención de solicitar la asistencia de la comunidad internacional para enfrentar la crisis humanitaria provocada por las bandas criminales. La declaración se produjo luego de que las pandillas bloquearan el acceso a la principal terminal de combustibles, limitando el funcionamiento de hospitales y empresas de tratamiento de agua en medio de un recrudecimiento del cólera en el país, que ya ha dejado al menos dieciséis muertos.

El 6 de octubre se reunió el Consejo de Ministros para discutir la propuesta del PM. El 7 de octubre, el Consejo autorizó a Henry a solicitar apoyo militar extranjero para frenar la violencia de las pandillas. Según el decreto publicado en el Boletín Oficial, se autoriza al primer ministro a solicitar la presencia de una fuerza armada especializada en el país, “para frenar la crisis humanitaria provocada, entre otras razones, por la inseguridad derivada del accionar de las pandillas”. y sus patrocinadores.” También afirmó que la presencia militar extranjera ayudaría a “reanudar la distribución de combustible y agua potable en todo el país, reactivar hospitales, reiniciar actividades económicas, el movimiento de personas y mercancías, y reabrir escuelas”.

El 9 de octubre, Henry escribió una carta al secretario general de la ONU, Antonio Guterres, pidiéndole oficialmente a la ONU que interviniera militarmente en el país. Es importante señalar que en las últimas semanas, Guterres, en la radio internacional francesa, secundando las afirmaciones falsas de Henry, dijo que las protestas masivas en las calles contra el gobierno de Henry están siendo lideradas por pandillas.

Condena nacional del llamado de Henry a una intervención militar extranjera

La resolución sobre la intervención militar generó críticas generalizadas entre organizaciones de la sociedad civil, líderes políticos y sociales y ciudadanía en general, quienes consideraron que la decisión ponía en juego la soberanía del país caribeño.

El exsenador y excandidato presidencial Jean Charles Moïse, líder del partido de izquierda Platfòm Pitit Desalin, señaló que ni Henry ni sus ministros tienen autoridad ni legitimidad para solicitar una presencia militar extranjera en el país. Charles Moïse agregó que la soberanía del país ha sido amenazada y llamó al pueblo a levantarse contra ello.

El partido Organización del Pueblo en Lucha (OPL) expresó su disconformidad con el ingreso de fuerzas militares extranjeras y reiteró que el país necesita apoyo para que la Policía Nacional pueda realizar su labor.

Reyneld Sanon, coordinador de Radio Resistencia y Agencia de Prensa Popular Haitiana, en un comunicado, rechazó la decisión del PHTK y sus aliados de “solicitar a las fuerzas imperialistas internacionales que ocupen el país por tercera vez”. Sanon denunció que la decisión insulta a “nuestros antepasados, que lucharon por romper las cadenas de la esclavitud”. Aseguró que “en caso de que la fuerza de ocupación militar extranjera llegue a Haití, todos los haitianos, los grupos progresistas, las organizaciones populares y los partidos políticos de izquierda, nos pondremos en pie para luchar”.

Jean Launy Avril, profesor de ciencias políticas y antropólogo haitiano, enfatizó que “el pueblo haitiano no necesita refugio humanitario de ningún país. Tienen derecho a vivir en paz en su país, sin intervención, sin injerencia, sin pandillas, sin gobiernos antipopulares y cipayos”.

En una serie de tuits, Launy Avril dijo que “la solución a la crisis haitiana debe estar en manos del pueblo haitiano, de sus organizaciones sociales y políticas y debe ser reconocida por la ONU”. “ Exigimos que la comunidad internacional respete el derecho del pueblo haitiano a movilizarse y exigir un futuro más promisorio. El pueblo haitiano es soberano, lleva más de un mes en las calles exigiendo cambios profundos para acabar con los malos gobiernos y el sistema que los oprime”, agregó .

Recordó que “en una carta reciente a la ONU, los movimientos sociales y políticos haitianos aseguraron que es el pueblo, el que está en las calles protestando, y que no son bandidos, y denunciaron la persecución política por parte de las fuerzas represivas de la des- PM de hecho”.

Launy Avril señaló que “la intervención militar nunca ha sido una solución; en Haití la evidencia es clara. La ONU lo trajo Cólera, matanzas masivas, más pobreza, más gente obligada a buscar el pan en otros países”. “Soldados de la ONU con su MINUSTAH (Misión de Estabilización) violaron niñas, y han dejado sin padres a innumerables niños y niñas, viviendo en más pobreza, las invasiones a Haití solo han dejado dolor”, agregó . También dijo que “la MINUSTAH masacró a la población civil, entre 2004 y 2008, con múltiples masacres en Cité-Soleil, y con una nueva invasión van a masacrar a los pobladores que luchan por la soberanía haitiana”.

Destacó que “el pueblo haitiano no quiere ni aceptará más elecciones organizadas por extranjeros. Siempre son fraudulentos y colocan sus títeres en contra de los intereses del pueblo”.

Asimismo, Madame Boukman, bloguera antiimperialista haitiana, en una serie de tuits, rechazó el llamado a la intervención militar y expuso la colusión entre bandas criminales, el gobierno y las fuerzas imperialistas.

“La fuerza policial de Haití controlada por Estados Unidos está mal equipada por diseño a través de un embargo de armas. Todas las armas deben ser aprobadas por el Departamento de Estado de los Estados Unidos. Mientras tanto, un flujo ilimitado de armas ilícitas de alto calibre ingresan a Haití desde EE. UU. para armar a las bandas y mantener a Haití permanentemente desestabilizado”, denunció Boukman .

“Las bandas son soldados de infantería de bajo nivel que reciben órdenes de las bandas de traje de alto nivel (imperialistas, burgueses y políticos). El sistema que los sostiene tiene que caer para que ellos caigan, como cayeron las bandas de Duvalier Tonton Macoute cuando las masas lo derrocaron”, agregó .

“Ariel Henry, un títere no elegido de facto impuesto a Haití después de que participó en el asesinato de Jovenel Moïse, recibió la orden de sus jefes imperialistas de llamar públicamente a una invasión extranjera. Él no representa a las masas”, criticó .

En otro tuit , señaló que la “intervención militar delegada de la ONU de 2004-2019 para “estabilizar” Haití resultó en cólera, círculos sexuales infantiles, masacres, violaciones masivas, secuestros endémicos, fraude electoral, inseguridad crónica, infestación de pandillas, detención indefinida, y la desigualdad crónica, entre otros temas”.

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