El VIH en España: discriminación, datos y prevención

Por Roberto Santos @nenedenadie

Treinta y cinco años han pasado ya desde que en junio de 1981 fueron descritos en Los Ángeles, EE UU, los cinco primeros casos en el mundo de lo que un año después se conocía ya como «SIDA», convocaron una conferencia de prensa donde describieron cinco casos de neumonía por Pneumocystis carinii en Los Ángeles. Al mes siguiente se constataron varios casos de sarcoma de Kaposi, un tipo de cáncer de piel.

Pese a que los médicos conocían tanto la neumonía como el sarcoma de Kaposi, la aparición conjunta de ambas enfermedades en varios pacientes no pasó desapercibida, así como tampoco que la mayoría de casos fueran hombres, homosexuales, sexualmente activos y de los cuales muchos de ellos sufrían de enfermedades crónicas que más adelante se identificaron como «infecciones oportunistas».

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En España el primer caso apareció en Octubre de ese mismo año en el hospital de Vall d’Hebron de Barcelona. Era un hombre de 35 años, homosexual, que llegó con sarcoma de Kaposi. Tenía un cuadro general de pérdida de peso y apetito, hemiplejia, y había tenido episodios de infección genital, en los dos últimos años. Le descubrieron una masa en la cabeza relativamente grande que asociaron a una metástasis del sarcoma de Kaposi y se le operó para extirpárselo, aunque finalmente murió cuatro días después.

Hoy, treinta y cinco años después disponemos de muchísima más información que aquellos primeros médicos que tuvieron que afrontarla sin saber absolutamente nada. Todavía no existe una cura, ni una vacuna, pero si es cierto que se ha avanzado muchísimo en su tratamiento, su diagnóstico precoz y en las condiciones de vida de las personas que lo padecen.

Pese a ello, el sida sigue siendo hoy motivo de discriminación y estigmatización en nuestro país. Según la encuesta Percepción de la discriminación en España realizada en 2013 por el Centro de Investigaciones Sociológicas, CIS, un 11,4% de encuestados se manifestaron incómodos con tener vecinos seropositivos, y según el estudio «Creencias y actitudes de la población española hacia las personas con VIH» de SEISIDA:

-El 58.8% de la población se sentiría entre algo y totalmente incómoda si algún compañero de colegio de su hijo estuviera infectado por el VIH. De estos, el 40.1% cambiaría a su hijo de colegio si pudiera.

-El 30.8% se sentiría entre algo y totalmente incómoda si alguno de sus compañeros de trabajo estuviera infectado por el VIH o padeciera la enfermedad del SIDA y el 31,1% pediría que esa persona fuera cambiada a otro sitio o se cambiaría si pudiera.

-Un 44,5% se sentiría incomodo si supiera que un empleado de la tienda donde compra habitualmente fuera seropositivo o padeciera la enfermedad, SIDA. El 52,3% cambiaría de tienda.

Y todavía hay más y peor, porque un 20% de los encuestados apoyarían medidas de segregación directa contra personas con VIH y se muestran partidarios de hacer públicos sus nombres, para que quien quiera pueda evitarlos.

Los datos nos hablan de que aún hoy ser seropositivo o tener SIDA es motivo de discriminación, evidencian que todavía existe miedo y que muchos siguen pensando eso de «por si acaso». Y qué queréis que os diga, a mí me ponen los pelos de punta, me revuelven hasta la nausea y me generan una sensación de impotencia que no os hacéis idea.

Curiosamente la mayoría de los encuestados esta en contra de discriminar a las personas seropositivas, pero ojo a la hipocresía en la que vivimos, prefieren no arriesgarse cuando se trata de si mismos o de sus familiares, ni siquiera en los casos en que está científicamente descartado el riesgo de transmisión y disponiendo de toda la información sobre como se trasmite el VIH.

En España cada año se dan mas de 3.000 nuevos diagnósticos de infección por VIH, la mayoría en hombres homosexuales de entre 25 y 35 años, la vía sexual es el principal modo de transmisión. El 80% llega a través de este tipo de relaciones, dado que a la incidencia entre la población homosexual hay que sumar el sexo sin protección entre heterosexuales, causa del 26% de los casos. La tendencia sigue a la baja entre los nacidos fuera de España, aunque aún son casi uno de cada tres nuevos afectados. Esta media es superior entre las mujeres, donde las inmigrantes son más de la mitad, un hecho que puede explicarse por la condición de víctimas de explotación sexual de muchas de ellas. Tras los españoles, la mayor tasa se registra entre la población latinoamericana (15,1%). Bajan un punto los afectados por drogas inyectadas, que son el 3,4% del total.

Ojo, porque hasta un tercio de los infectados con VIH presentes en España desconocen que lo están. Esto da lugar a un diagnostico tardío en el 48% de los casos, favoreciendo nuevos contagios en un 60% de los casi 4.000 nuevos casos registrados cada año.

Los motivos por los que la gente no se hace la prueba del VIH en nuestro país, son el miedo al diagnóstico positivo y el estigma que se sigue asociando a la enfermedad y que a tenor de los datos, es hasta justificado.

Claramente algo estamos haciendo mal, porque esos niveles de discriminación evidencian una gran ignorancia sobre lo que es el VIH y como se transmite, y ojo, se transmite, no se contagia, porque no es lo mismo.

Una enfermedad contagiosa es aquella causada por un agente infeccioso que puede sobrevivir fuera del cuerpo humano, es decir, en el medio ambiente, agua, aire, alimentos…, dentro de un animal portador durante períodos de tiempo prolongados, y que otro individuo puede adquirir a través del contacto con cualquiera de estos medios. Este agente infeccioso contagioso cumple parte de su ciclo vital fuera del cuerpo humano.

Una enfermedad transmisible es la causada por un agente infeccioso que no puede sobrevivir fuera del cuerpo humano, lo que hace imposible que pueda contagiarse por el medio ambiente. Solo pueden transmitirse por contacto directo entre el cuerpo de una persona y de otra a través de un intercambio de fluidos entre la persona sana y la infectada. En el caso del VIH estos fluidos se reducen a sangre, semen, secreciones vaginales y leche materna. No se han descrito casos de transmisión ni por saliva, ni por lágrimas ni por sudor. Por otro lado cumplen todo su ciclo vital (nacen, se reproducen y mueren) dentro del cuerpo humano.

Esto es importante, porque explica porque es un absurdo tener miedo a compartir espacio de trabajo con una persona seropositiva o a comprar en una frutería donde el dependiente lo sea.

La percepción del SIDA como una enfermedad crónica ha hecho que mucha gente se relaje en la prevención contra el VIH, lo que nos lleva a la importancia de concienciar y educar en la prevención, en el uso del preservativo como único medio para evitar la transmisión del virus y no solo para evitar embarazos no deseados, que también, e insistir en la importancia de hacerse la prueba del VIH lo antes posible para mejorar el pronóstico y la calidad de vida de las personas infectadas, así como para evitar la transmisión a otras personas.

Os recuerdo que la recomendación de usar preservativos ha sido muy polémica con algunos sectores conservadores y hasta con la Iglesia Católica que llegó a recomendar la abstención sexual como mejor forma de prevención. Por suerte la Iglesia, parece ser que se ha relajado en su postura contra el condón y ahora acepta su uso en «ciertos casos».

Los avances científicos sobre el VIH han sido muchos desde que se descubrió la enfermedad hace 35 años ya, pero todavía no existe cura y hace falta mucha investigación y por tanto dinero para continuar avanzando y llegar a encontrar la cura definitiva algún día.

Los últimos descubrimientos demuestran que el tratamiento contra el sida reduce el riesgo de transmisión del VIH de una persona a otra en un 96%. Además este año ha habido importantes avances en la lucha contra el SIDA, por ejemplo, unos científicos cubanos han logrado detener la transmisión entre madre y feto, los científicos Jerome Zack y Scott Kitchen del Centro de Investigación en Células Madre de la Universidad de California están trabajando en una técnica que reduce los niveles de VIH en ratones de un 80 a un 95%. El Instituto de Investigación The Scripps (TSRI), la Iniciativa Internacional por una Vacuna contra el SIDA (IAVI) y la Universidad de Rockefeller han demostrado que una posible vacuna experimental ha logrado estimular el sistema inmunitario y bloquear la infección del VIH de ratones. Lo que abre la puerta a que algún día podamos tener una vacuna efectiva. Y estos son solo algunos ejemplos, de los muchísimos estudios que se están haciendo sobre el VIH, de ahí la importancia de la inversión en Investigación, cosa en la que nuestro país no es precisamente puntero.

Actualmente hay más de 36 millones de personas infectadas por VIH, de los cuales 2,1 millones son niños y adolescentes. El número de personas

con el virus sigue aumentando, en gran parte debido a que más personas en el mundo tienen acceso al tratamiento antirretrovírico y, como resultado de ello, viven más y con más salud. Según datos de junio de 2015, había 15,8 millones de personas en tratamiento. Al mismo tiempo, pese a que las nuevas infecciones por el VIH han disminuido, todavía hay un número inaceptablemente alto de nuevas infecciones por el VIH y de muertes relacionadas con el sida cada año. En 2014, alrededor de 2 millones de personas se infectaron con el VIH y 1,2 millones de personas murieron de enfermedades relacionadas con el SIDA.

Por eso, no dejes de cuidarte, usa siempre preservativo en tus relaciones y ante la más mínima duda hazte la prueba del VIH, es absolutamente gratuita y por supuesto confidencial, da miedo, sí, pero no estarás sólo y es importante un diagnostico precoz para empezar cuanto antes a tratarse y también para evitar transmitir el virus a alguien más. Si no sabes dónde hacértela, no te preocupes que ahora mismo te lo digo, en cualquier Centro de Salud a través del médico de cabecera. Qué te da vergüenza terrible hacerlo con tu médico de cabecera, existen también Centros de Pruebas Rápidas a los que puedes acudir y salir de dudas, aquí te dejo un enlace con las direcciones de centros en tu ciudad (http://www.infosida.es/las-pruebas-del-vih/donde-hacerse-la-prueba-del-vih). También hay asociaciones que te pueden ayudar, hacerte la prueba y asesorar en caso de que salga positivo, como Fundación Triángulo, (http://www.fundaciontriangulo.org/areas/salud/95-prueba-rapida-del-vih).

En fin, espero que todos estos datos nos sirvan para recapacitar, no solo sobre la importancia de la prevención y de la investigación, si no que también sobre como reaccionamos ante las personas portadoras del VIH, el miedo es algo irracional que en este caso se puede contrarrestar con información objetiva y clara sobre como se transmite el virus. Piensa en ello, infórmate y no discrimines a nadie, porque no hay ninguna razón para ello.

4 Comments

  1. Ignorantes? Y tanto…. como que la mayoría no saben aun que los test son un gran fraude, deberían empezar leyendo lo que dicen los fabricantes en el prospecto…se asombrarían.

  2. Gran artículo, muy informativo, muy documentado y muy interesante. Estoy de acuerdo en la importancia de la prevención y de hacerse la prueba al más mínimo caso de duda. Periodistas como el que escribe este artículo son los que dignifican esta profesión, sin ir al morbo o a la moralina barata, exponiendo los hechos y contándolo con un ritmo que hace que la lectura resulte fácil. Enhorabuena por tan buen trabajo.

  3. muy buen artículo; la concienciación es algo que hay que trabajar, está claro. Todavía recuerdo cuando las muestras de pacientes con VIH en el hospital venían identificadas como tal, saltándose a la torera los protocolos de confidencialidad y además haciendo que la gente trabajara con esas muestras de manera diferente… ahora que está prohibida esa señalización todavía hay gente que la quisiera de vuelta (otras infecciones parece que da igual, pero VIH….)

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