El Germinal español

un movimiento liberal interclasista liderado por las élites culturales del país exigió democracia y modernización de España, hastiados de la profunda crisis económica y social que había dejado al país atrasado en relación con el contexto europeo

Por Dani Seixo

«No nos interesa hacer buenos obreros y empleados, buenos comerciantes. Queremos destruir la sociedad actual desde sus comienzos».

Pablo Iglesias

El 12 de abril de 1931, España celebró unas elecciones municipales que cambiaron el rumbo de su historia. El resultado de estos comicios supuso el fin de la monarquía borbónica y el inicio de la Segunda República española, una experiencia política que marcó el porvenir del Estado. En su libro «El Germinal español», Francisco Sánchez Pérez describe con pulso cirugía el contexto histórico en el que se desarrollaron estas y elecciones su resultado, clave para entender el fin de la monarquía borbónica y el nacimiento de la Segunda República.

En las grandes ciudades y en muchas otras localidades, un movimiento liberal interclasista liderado por las élites culturales del país exigió democracia y modernización de España, hastiados de la profunda crisis económica y social que había dejado al país atrasado en relación con el contexto europeo.

La monarquía borbónica se encontró rota e incapaz de gestionar la crisis económica y social que atravesaba España. La población sufrió las consecuencias de una crisis que se había iniciado en 1929 y que había afectado gravemente al país. La falta de trabajo, la pobreza y la inestabilidad política y social eran los grandes problemas a los que se enfrentaba la población española.

En este contexto, las elecciones municipales del 12 de abril de 1931 se seleccionaron en un plebiscito sobre el régimen y el futuro de España. El resultado electoral fue contundente: la coalición republicano-socialista obtuvo la mayoría de los votos en las grandes ciudades y en muchas otras localidades, dejando a la monarquía definitivamente al pie de los caballos.

El régimen, incapaz de gestionar la crisis, optó por pactar un final. El 14 de abril de 1931, el rey Alfonso XIII abandonó España y se proclamó la Segunda República española. Era el 24 de Germinal, según el calendario republicano francés.

El resultado electoral fue recibido con gran alegría por la población. Las calles se llenaron de gente que celebraba el triunfo de la democracia y el cambio. Fue una auténtica fiesta popular jamás presenciada en España. Se abría una puerta a la participación democrática de la clase trabajadora y al cambio, una puerta que pronto se encontraría con nuevas dificultades y desafíos.

En «El Germinal español», Francisco Sánchez Pérez nos ofrece una visión detallada de los acontecimientos que desembocaron en la proclamación de la Segunda República española. Destaca el contexto histórico en el que se desarrollaron estos acontecimientos y la importancia de las elecciones municipales del 12 de abril de 1931 como un momento clave en la historia de España.

Nos encontramos ante un libro que nos permite experimentar la historia de España de una manera nueva y emocionante. Un relato apasionado de cómo la población española exigió democracia y cambio ante una monarquía anquilosada y ajena a la suerte del pueblo. Una lectura imprescindible para cualquier persona interesada en la historia de España y que quiera saber cómo la lucha por la democracia y la justicia social puede cambiar el curso de la historia.

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