En los años 80, una sección del feminismo que surgido de las teorías posmodernas de Derrida y otros autores, terminó adaptándose a la corriente dominante del neoliberalismo, en concreto la teoría queer.
Es curioso que, tras la crisis económica, tras la pandemia, el consumo siga creciendo a buen ritmo, aunque los salarios no aumenten demasiado y las condiciones laborales no mejoren sustancialmente.
¿Es suficiente que el Tribunal Constitucional haya declarado la constitucionalidad del aborto y su necesaria protección porque, en caso contrario, se vulneran derechos fundamentales? A nuestro juicio, la respuesta es no.
Como parte del rearme demográfico y en vistas del cierre de las unidades de maternidad, se insta a las mujeres que den a luz por la nación en casa, pero se las formará para que corten ellas mismas el cordón umbilical y se realicen la episiotomía por sí mismas.
La incorporación de la IVE a los centros públicos no está teniendo en cuenta esta premisa, haciendo el relevo solo en base al método farmacológico, despreciando un método, el instrumental, elegido por más del 80% de las mujeres.
Documentales como “Malta Radio”, “Cartas Mojadas” o películas como “Mediterráneo”, nos deberían hacer reflexionar sobre esa crisis humanitaria a la que Europa no está dando solución, pero sobretodo, deberían hacer reflexionar a nuestros dirigentes.