Con armas pero sin soldados

Las tropas ucranianas están teniendo problemas frente a un ejército ruso con más combatientes a su disposición y muchos ucranianos están eludiendo la llamada a filas.

Por Lucio Martínez Pereda | 28/11/2024

Pese a toda la tecnología para matar a distancia no hay ninguna guerra que se pueda vencer sin conquistar con soldados el territorio. EEUU se inventó una guerra para debilitar a Rusia, reanimar la semi fallecida OTAN y fortalecer su declinante poder político y económico en Europa, pero va perdiendo la Guerra de Ucrania contra Rusia. Era una guerra diseñada para librarla con los soldados del país víctima y el dinero de los europeos, pero se ha quedado sin lo fundamental: los soldados del país víctima.

La escasez de hombres disponibles está afectando significativamente al ejército ucraniano. La edad media de los soldados en el frente ronda los 43 años. Hay soldados que llevan dos años luchando sin descanso y están agotados, necesitando rotación y descanso. Las tropas ucranianas están teniendo problemas frente a un ejército ruso con más combatientes a su disposición y muchos ucranianos están eludiendo la llamada a filas, ya son miles los desertores y muchos lo consiguen simplemente con sobornos sin necesidad de huir del país o esconderse.

La escasez de hombres dificulta la restauración de unidades degradadas y la creación de nuevas unidades de recambio o reforzamiento de frentes debilitados. La falta de soldados impide la capacidad de Ucrania para mantener sus posiciones y lanzar contraofensivas efectivas.

Estas dificultades están obligando a Ucrania a implementar medidas como la acelerada reducción de la edad de reclutamiento y la creación de nuevos sistemas de movilización -incremento de salarios con pagos aplazados y ofertas de trabajo en la administración- para intentar mantener la capacidad de sus Fuerzas Armadas, frente a un ejército ruso con muchísima capacidad de rotación en reserva.

Es cuestión de pocos meses para que un ejército sin ninguna capacidad de renovación deje de estar operativo y tenga que deponer las armas.

Además- siguiendo los consejos de movilización y reclutamiento proporcionados por los expertos de la OTAN- se ha aprobado un proyecto de ley que permite a delincuentes comunes ir al frente a cambio de una liberación condicional. Por si esto fuera poco, la falta de provisión de soldados está obligando a reducir el periodo de entrenamiento a 1 mes: los apresurados y mal entrenados reclutas carecen de la capacitación psicológica suficiente para protegerse ante la eficaz propaganda del ejército ruso llamando a la deserción . El ejército ucraniano está pasando por un proceso de lumpenización y probable autodestrucción. El problema mayor se producirá con la llegada de la paz y cuando todos estos efectivos desmovilizados constituyan grupos de delincuentes organizados que se repartirán por toda Europa.

Un eficaz programa de reclutamiento y movilización es muy importante en todas las guerras. El actual sistema ucraniano indica desesperación e impotencia y esa imagen proyectada sobre la población civil es causa de aparición de derrotismo. Y cuando el derrotismo aparece en la retaguardia civil la Guerra siempre acaba siendo perdida.

La extensión del derrotismo bélico en cualquier retaguardia civil es especialmente importante en el caso de las mujeres: cuando las hermanas, las hijas, las madres o las esposas les dicen a los soldados que abandonen las armas, estos las dejan siempre. Desde la Guerra franco prusiana de 1870 sabemos que la percepción social que se tiene en la retaguardia de lo que sucede en el frente es tan fundamental para mantener el esfuerzo bélico como la provisión de hombres, dinero y armas.

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