El complemento para las largas carreras es una mentira: no lo va a recibir casi nadie

«Queremos manifestar con contundencia que con este proyecto de ley NO SE HACE JUSTICIA a la generación que más ha contribuido al sostenimiento del sistema de pensiones».

La asociación ASJUBI40 (Jubilación Anticipada sin penalizar con 40 años o más cotizados) queremos mostrar nuestro absoluto rechazo al tratamiento que el proyecto de ley de pensiones, que se va a aprobar durante los próximos días, pretende dar a las jubilaciones anticipadas con más de cuarenta años cotizados, que han sido penalizadas con coeficientes correctores.

Consideramos muy grave que se esté transmitiendo a la ciudadanía, y sobre todo a nuestro colectivo que, cumpliendo las dos condiciones repetidas hasta la saciedad en casi todos los titulares en medios de comunicación, es decir, 44’5 años cotizados, o 40 años cuando se estén cobrando menos de 900 euros, los pensionistas ya jubilados comenzarán a recibir un complemento por la diferencia entre las nuevas tablas de coeficientes reductores y las antiguas.

Hay que tener en cuenta que, en la mayoría de los casos, aun dándose esas condiciones, los ya jubilados, no van a recibir complemento alguno. Este, según se recoge en el proyecto, consistirá en la diferencia entre el coeficiente que se aplicará para los nuevos jubilados, según las nuevas tablas incorporadas al proyecto, y el que ya viniera sufriendo el jubilado anticipado.

Las nuevas tablas de coeficientes reductores se establecen por meses de anticipación en lugar de por trimestres, como hacía la regulación anterior. En esta nueva tabla, hablamos siempre de la referida a jubilaciones involuntarias, hay pequeñísimas variaciones a favor de los pensionistas, con respecto a la actual, que oscilan entre el 0,50 y el 1,25% (aprox.) siempre que el momento de su jubilación se hubiese retrasado 1 o 2 meses, dentro cada tramo trimestral (de los antiguos). Es decir, si en lugar de anticipar 48 meses, “aguanto” un mes o dos, y anticipo 47 o 46 meses, el coeficiente que me aplicarían sería ligeramente más beneficioso que con la anterior regulación. Si en lugar de 45, lo hago a los 44 o 43, ocurriría igual. Si en lugar de 24 meses de anticipación, me espero al 23 o 22, también tendré una pequeña mejora. Aunque todos los que se hayan jubilado en el mes que coincide con el trimestre, no tendrán complemento alguno ya que en esos casos los coeficientes actuales y los nuevos son los mismos (ver gráficos adjuntos).

La gran mayoría de jubilados anticipados hasta el día de hoy, han optado por esta vía, la jubilación anticipada, porque se han encontrado fuera del mercado laboral con cincuenta y tantos años, con la imposibilidad de reincorporarse al mercado laboral, y arrastrando años de precariedad a base del subsidio de desempleo o directamente sin ingresos.

En estas situaciones lo normal ha sido acceder a la jubilación justo en el momento en que la ley lo permite, es decir, 48 meses (4 años) “justos” en caso de determinados tipos de despido, o 24 meses (2 años) “justos” para el resto. Nadie, a fecha de hoy, cuando se jubiló, se planteó esperar uno o dos meses por si en un futuro, un ministro decidiera mejorar los coeficientes reductores en caso de aplazar uno o dos meses la jubilación (absurdo ¿no?). ¡Y no parece posible hacer un viaje en el tiempo para aplazar “un poquito” el momento de la jubilación que ya sucedió!

Por no hablar de que, hasta hace bien poco, era la propia Seguridad Social quien obligaba “de facto” a acceder a la jubilación en el momento exacto en que lo permitiera la ley, momento en el que se dejaban de percibir el subsidio para mayores de 52/55 años en su caso.

¡Todo esto parece de broma, pero es una broma de muy mal gusto!

Además de lo descrito anteriormente, sobre el tratamiento que la nueva ley va a dar a las jubilaciones anticipadas con largas carreras, que no podemos calificar de otro modo que de “tramposo”, también queremos señalar otros dos “pequeños detalles” que se deducen de una comparación un poco profunda entre las nuevas tablas y los antiguos coeficientes trimestrales, y que se nos ha “vendido” como una “bondad” de la nueva norma para las largas carreras. Para antiguos jubilados, pero también para los futuros.

Uno es que las diferencias, siempre mínimas, pero “a favor”, para el mismo supuesto de meses de anticipación, se van haciendo menores a medida que los años de cotización son más. Ejemplo, con 46 meses de anticipación, si el jubilado acredita 38 años y 6 meses de cotización, mejora su coeficiente reductor en 1,25 puntos, pero esta diferencia va reduciéndose hasta 1 solo punto de mejora si acredita 44 años y 6 meses de cotización (ver gráficos adjuntos). Esto es, como mínimo, muy extraño: cuantos más años cotizados menos complemento a recibir.

El segundo aspecto “curioso” es que las “mayores” mejoras se producen desde 20 meses o menos de anticipación. No es fácil para los trabajadores expulsados del mercado laboral esperar unos meses para acceder a este derecho, ni tampoco algunos años, si no se tienen otras fuentes de ingresos suficientes. Y, desde luego, resulta completamente imposible “atendiendo a las leyes de la física” retroceder en el tiempo para rebajar los coeficientes ya aplicados, con ese anunciado maravilloso “complemento”.

Por todo lo anterior, desde ASJUBI40 consideramos imprescindible, y exigimos, que el Gobierno informe cuanto antes del número de “beneficiarios” del anunciado complemento para las largas carreras de cotización, qué importes tendrán esas percepciones, y qué porcentaje supone sobre el colectivo de jubilados anticipados, penalizados en su día, y con más de cuarenta años cotizados.

También creemos imprescindible que se conozcan los costes de otras situaciones de jubilados anticipados no penalizados.

Queremos manifestar con contundencia que con este proyecto de ley NO SE HACE JUSTICIA a la generación que más ha contribuido al sostenimiento del sistema de pensiones, trabajadores que se incorporaron al mercado laboral con 14 o 16 años, que no han parado de contribuir durante TODA su vida con su trabajo y sus cotizaciones, y que, en un altísimo porcentaje, se han visto expulsados durante las últimas crisis económicas. Al contrario, SE PERPETÚA Y AUMENTA LA DISCRIMINACIÓN a este colectivo.

Nuestra reivindicación no es una petición de limosnas, es la reclamación de un derecho que nos hemos ganado con el contrato social que significa el sistema público de pensiones.

Somos conscientes de que toda solución a una injusticia suele suponer un coste, pero no entendemos que, para otros casos existentes, e incluso para algunos que se están incluyendo para el futuro (como, por ejemplo, ertzainas o mossos d’esquadra) este aspecto económico no suponga un problema. ¿Discriminación?

Pedimos, asimismo, a los partidos políticos que apoyan al Gobierno, y que hasta el día de hoy nos han apoyado y defendido en todo tipo de instituciones, que recapaciten y modifiquen su posición respecto a las propuestas recogidas en este proyecto de ley. De lo contrario, entenderemos que, claramente, están faltando al compromiso que adquirieron de defensa del colectivo de trabajadores con largas carreras.

¡No a las penalizaciones a las jubilaciones anticipadas con carreras de 40 años o más cotizados!

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