Una paz de urgencia para una guerra relámpago
El acuerdo llega en medio de una brutal ofensiva azerí, que estaba a punto de conquistar la estratégica ciudad de Shushi, la segunda en importancia tras la capital, Stepanakert, después de semanas en las que ambas habían sido bombardeadas indiscriminadamente, forzando el éxodo de la población civil, y ante la posibilidad de que la derrota fuera total para los armenios y perdieran, en poco tiempo, todo el territorio de Nagorno Karabaj.