Entrevistamos a Carmen Romero, quien ha viajado a Valencia como voluntaria para ayudar en las zonas más afectadas por la DANA.
Por Oriol Sabata | 12/11/2024
Sin duda, el 29 de octubre de 2024 será recordada como una jornada trágica para la clase obrera valenciana. Una catástrofe natural sin precedentes en la historia reciente que ha dejado la zona devastada y cuyas consecuencias se han agravado debido a una negligente y desastrosa gestión por parte de las autoridades.
Tras casi dos semanas del suceso, personas solidarias provenientes de toda España siguen desplazándose hasta la zona afectada para ayudar en tareas de limpieza y saneamiento. Desde Nueva Revolución conversamos con Carmen Romero, quien nos explica su experiencia como voluntaria en una brigada.
¿Qué te ha llevado a tomar la decisión de acudir como voluntaria?
La solidaridad de clase. Tenemos que entender que, aunque la catástrofe afecte a todas las clases sociales, las consecuencias no son iguales para todos.
Estando aquí lo he visto aún más. Los barrios más afectados son los barrios obreros. Y son también dónde llegan más tarde las ayudas del Estado. Por no hablar de las consecuencias futuras que esto tendrá a nivel económico y psicológico.
¿A qué zona has ido y cuál es la situación que te has encontrado?
He estado en Algemesí y en Paiporta. La situación es desoladora. Es verdad que ya han llegado muchísimos equipos de emergencia, pero hacen falta más. Puede parecer exagerado, pero había veces que entre el ruido de los helicópteros, los coches militares, las sirenas, los escombros, las colas de voluntarios para comer y el ambiente en general parecía que era una zona de guerra.
Las personas que viven en la zona te agradecían todo el rato que estuvieras allí mientras intentaban rehacer sus vidas.
En cada calle había puestos de voluntarios que te ofrecían desde comida y agua a material sanitario y de protección. También había personas que en sus portales o garajes tenían puestos de abastecimiento.
Los bomberos están haciendo un trabajo encomiable. El trato que dan a todas las personas afectadas y voluntarios pese a los niveles de estrés que tienen es de alabar. Tanto yo como el resto de personas que veníamos juntos en brigada nos hemos sentido muy seguros trabajando junto a ellos.
¿Existe una buena organización del voluntariado?
La verdad es que no. Pero es normal. La mayoría de gente viene de forma espontánea. Por suerte, yo iba en una brigada organizada con gente de la zona y sabíamos a dónde ir, pero había mucha gente de un lado a otro como pollos sin cabeza.
¿Más allá de los voluntarios, hay presencia de maquinaria y profesionales en la zona (bomberos, militares…)?
La hay. Pero debería haber más. Si no se refuerzan los equipos de profesionales esto va para largo.
La gestión de la catástrofe ha generado un malestar evidente entre la población, que considera que no hubo una respuesta rápida ni a la altura de las circunstancias. ¿Cómo valoras la gestión tanto del gobierno de Sánchez como el de Mazón?
Creo que la gestión de ambas administraciones representan a la perfección el espíritu del bipartidismo y el régimen del 78. Sánchez pudo haber decretado el Estado de Alarma, pero le habrían llamado comunista y quiere jugar al eterno centro. Además de querer desgastar al gobierno del PP en el País Valencià dejando que pueda gestionar la tragedia. El PSOE es experto a la hora de jugar a los contrapesos.
Mazón estaba con su amante a la que quería enchufar de directora en la televisión pública. Es de película de Berlanga total. El PP siendo el PP.
El PSOE en campaña parece más de izquierdas que un leninista, pero gobernando tiene la sangre azul. Le falta valentía política. El gobierno puede requisar temporalmente bienes a grandes empresas en situaciones de emergencia como esta. Puede requisar pisos vacíos a bancos y maquinaria pesada a empresas que, por cierto, no paran de subir el precio en el mercado aprovechando la tragedia.
El PP ha demostrado ser un partido de mafiosos. Un partido con un presidente desaparecido cuando ya autoridades alertaban del peligro, que además privatiza servicios públicos y le baja los impuestos a los ricos. Y cuando llega una tragedia, pide más protección del Estado.
Ambas administraciones están jugando un papel lamentable. Pero sin duda Mazón es el principal culpable. A Sánchez se le puede criticar ser un blando, pero que eso no difumine que el principal problema de todo esto es que el PP funciona como una empresa de expolio de lo público para beneficio propio y de sus amigos empresarios.
¿Qué opinas sobre la presencia de grupos de extrema derecha que están tratando de sacar rédito político y canalizar el malestar por la catástrofe?
Es preocupante. He visto a algún que otro influencer preguntando a vecinos con la intención de crispar el ambiente. Eso sí, con ni una manchita de barro.
También he visto muchos grupos organizados y uniformados con camisetas de grupos de extrema derecha. Parece que son muchos, pero la realidad es que ellos van todos con simbología visible mientras el resto de personas van vestidas normales. Hay muchísima gente de la izquierda organizada que iba normal, sin símbolos. Esto hace parecer que en la extrema derecha son más. Lo que ocurre es que van dando la nota e intentando llamar la atención. En mi brigada hemos decidido venir sin nada que nos identifique políticamente porque creemos que no procedía. Y eso que todos pertenecemos a la izquierda organizada.
Más allá de determinadas personas con cierta relevancia pública que tienen afán de protagonismo y de algunos grupúsculos con intenciones oscuras, ¿cuál consideras que ha sido la respuesta de la sociedad española ante la catástrofe?
Ha aumentado la desafección política. El bipartidismo es el mayor potenciador de desafección política. PSOE y PP echándose las culpas mientras la gente lo pasa mal. Lo peor es que entre todo eso los grupos de extrema derecha ganan el relato con eso de que los políticos no sirven para nada, cuando lo que no sirve es la política del mercadeo de votos.
Esto potencia el odio a la clase política y divide a la clase trabajadora. Hablan de los de abajo y los de arriba cuando deberíamos hablar de clases sociales. Esto no es otra cosa que una pugna más entre la clase trabajadora a la que le pilló la DANA en su centro de trabajo y una burguesía que, sabiendo lo que se venía, no quiso cerrar la empresa para seguir ganando beneficio económico. Y de por medio, un PP que gobierna y legisla en beneficio de esa burguesía y no dio el aviso porque a quienes defienden son a los Roig y demás mandamases.
Muy buena entrevista. Desconfiad de aquellos que traten de evadir de responsabilidad a Mazón o a Sánchez. Esto no va de colores políticos sino de asumir la mala gestión de una catástrofe. Solo el pueblo salva al pueblo.