Aro es todo un personaje. Nacido en 1968. Ha pasado por todo tipo de problemas. En 1990, un francotirador le disparó desde un barrio a gran altura; en febrero de 1992 fue herido por un proyectil de mortero; luego, unos meses más tarde, en agosto. El 20 de enero, él y su escuadrón fueron emboscados, y ese fue el último clavo en el ataúd. Dice que no hay ni un solo punto intacto en su cuerpo, a excepción de un lugar. Ahora no trabaja.
Se el primero en comentar