Al otro lado del muro

A lo largo de 184 páginas, Raül Romeva i Rueda pretende señalar los prejuicios más comunes acerca de las prisiones, pero también acerca de quienes las pueblan. 

Por Dani Seixo

«Al otro lado del muro, Repensar las prisiones para mejorar la sociedad» de Raül Romeva i Rueda, es mucho más que un libro escrito por un preso político o una mera reflexión acerca de las condiciones y el estado de las prisiones del estado, realizada desde la propia experiencia. Socialmente insertos en una clara deriva punitivista, que en los últimos años ha logrado arrastrar a una gran parte de la población a un populismo penal, contemplando la privación de libertad únicamente como una forma castigo o directamente como un método de venganza contra el recluso, este título pretende repensarlo todo, poniendo encima de la mesa y con profunda claridad la realidad de las cárceles.

La cárcel no puede ser un elemento socialmente extraño u oculto, no debe contemplarse como una institución al margen de la sociedad, ni un lugar en el que olvidar a quienes son contemplados como una disfunción social. Normalmente, aquellos que terminan en prisión, son los que durante toda su vida se han encontrado en los márgenes de nuestra realidad común.

A lo largo de 184 páginas, Raül Romeva i Rueda pretende señalar los prejuicios más comunes acerca de las prisiones, pero también acerca de quienes las pueblan. El preso, el delincuente, incluso el criminal, no puede ser abandonado a su suerte, ni olvidado en un rincón oscuro a la espera de que cumpla penas de prisión cada vez más duras. Las cárceles deben dejar de ser contempladas como un elemento de castigo, para insertarse cada vez con mayor seguridad en el campo de la educación social, logrando que aquellos que han errado en los márgenes de nuestra sociedad, puedan «reintegrarse» plenamente en el corazón de nuestra convivencia sin ser señalados o empujados a volver a caer en los mismos errores que los llevaron a ser apartados de nuestra convivencia común.

Mediante un ejercicio valiente y sincero, este título nos recuerda que no es lo mismo vivir la cárcel que ver los barrotes desde el exterior. Dentro de cada prisión conviven cientos de historias sociales, cientos de realidades familiares, laborales, personales, pero también un claro componente social que hace que sea común la responsabilidad de lograr transformar esos espacios en entornos más abiertos, seguros y dispuestos para proporcionar herramientas de reinserción a quienes han terminado en su interior. Un mayor punitivismo, una mayor violencia contra quienes han cometido un delito o un crimen, no garantiza que estos actos no vuelvan a cometerse y no avanzan en una sociedad más segura. Al contrario, la violencia y la venganza, fomentan una espiral de violencia y marginalidad que resulta difícil romper.

Pero no debemos entender este libro como un brindis al sol o un relato antipunitivista simple y vacío. Al otro lado del muro habla de las prisiones desde el interior y cara al exterior, habla de un modelo más tractamental, incide en la reinserción y pone en el foco de toda esta reflexión tan necesaria acerca de nuestras prisiones el «arrepentimiento» del recluso y su capacidad para reflexionar y cambiar.

Con este título, no solo se pretende poner el foco al recluso o la prisión, sino también al sistema judicial, político y a la propia sociedad que se muestra capaz de olvidarse de sus cárceles, definiendo de este modo sus propios miedos, errores y demonios. Para poder cambiar nuestras prisiones, para poder erradicar el delito y los muros que nos separan, necesitamos realizar un esfuerzo común, precisamos de un modelo valiente que como sociedad nos permita poco a poco caminar cara a la utopía, quizás real, de un mundo sin muros, sin prisiones. No por «imposible» debemos dejar de caminar cara a nuestras metas.

No pretendan ustedes encontrar un libro que evite los asuntos más espinosos en relación a las prisiones, ni un argumento simplista propio de un antipunitivismo pueril. En las páginas que siguen, encontraran ustedes una introducción al camino que debe terminar con las prisiones como lugar de castigo sin reflexión, un primer paso para repensar y transformar nuestras prisiones y nuestra propia sociedad.

 

CONTENIDOS

A modo de introducción

  • 1.¡Que se pudran! En manos del populismo punitivo
  • 2.De la prisión imaginada a la real
  • 3.Un modelo dinámico y en constante evolución
  • 4.La reinserción como parámetro,la rehabilitación como instrumento
  • 5.Pongámonos a trabajar

A modo de conclusión: hacia un modelo de prisiones abiertas 

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