El fin de las derechosferas consiste en imponernos sus basureros como paraísos terrenales. Aspiran a distorsionarnos toda noción democratizada de la economía, de la política y de la inteligencia emancipadora
De nuevo se toman medidas absurdas que solo piensan en la propaganda y en los negocios, como la venta de autotest de antígenos sin prescripción en las farmacias