El actual «no a la guerra» en Siria es un no hipócrita y tardío al servicio del EI

Por André Abeledo

La guerra en Siria es y ha sido terrible, en estos años el mundo le ha dado la espalda al conflicto, en estos años Occidente solo ha «ayudado» con bombardeos y apoyando a los supuestos «rebeldes», que en la mayoría de las ocasiones se han demostrado como miembros del llamado Estado Islámico.

Occidente utilizó a los refugiados como coartada para intervenir en Siria y cuando el rumbo del conflicto ya no le venía bien les dio la espalda, los abandonó en terribles campos de refugiados, dejó que se ahogasen en el Mediterráneo, los dejó en manos de las mafias, miró para otro lado ante la desaparición de miles de niñas y niños en Europa.

Curiosamente después de todos estos años de sufrimiento resulta que ahora desde los medios de comunicación los mamporreros del poder tratan de poner en marcha un movimiento del «NO A LA GUERRA», un movimiento que trata de apoyar la solicitud desde Occidente de una tregua, este movimiento consigue además el apoyo de los “progres del mundo” y del pacifismo de márquetin que se acuerda de las guerras cuando salen en televisión.

Una solicitud de tregua y un “NO A LA GUERRA” que coincide con la derrota en Siria del Estado Islámico, la barbarie del EI está siendo totalmente derrotada y Occidente pide “tiempo muerto”, pero ¿por qué ahora?, es realmente una tregua humanitaria o un intento de parar el avance del ejército sirio, es realmente un “NO A LA GUERRA”, o un no a la derrota de nuestros intereses en Siria?

Realmente este es un «NO A LA GUERRA» perdida por la OTAN y sus terroristas, en este juego donde lo que importa es la geoestratégia y el objetivo real es el expolio de recursos energéticos, el pueblo sirio y su sufrimiento no importa, como no importan los refugiados, ni las masacres perpetradas por el EI, ni los mercados de esclavas, ni la venta y violación de niñas, ni las torturas y asesinatos que comete el ISIS.

El Estado Islámico no impone una dictadura en los territorios que controla, lo que impone es el infierno, son gigantescos campos de concentración donde la esclavitud sexual de niñas, algunas son casi bebés, es conocida por todos, niñas violadas decenas de veces al día, aquellas niñas y mujeres que se niegan a sufrir alguna de las depravaciones sexuales son torturadas y asesinadas, las ejecuciones públicas son el pan de cada día, el terror es la ley.

Pero la OTAN y Occidente piden una tregua ante el imparable avance del ejército sirio, defienden la barbarie de los llamados por Occidente “rebeldes”. Rebeldes que no son más que terroristas del Estado Islámico.

Los del “NO A LA GUERRA”, si realmente quieren salvar al pueblo sirio deben decir “NO A LA INTERVENCIÓN”, no a la barbarie del EI, deben exigir que se deje de armar y financiar al EI, que el mundo no les compre petróleo, que no les vendan armas, ni Toyotas, que dejen de apoyar a las bestias que torturan pueblos en Siria, Libia, o Iraq, gracias a que Occidente ha destruido sus Estados para robar sus recursos.

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